Asturias necesita más empresarios. Muchos más de los que tiene. Y la primera piedra para fomentar el espíritu emprendedor debe ponerse ya en la formación. Desde abajo. Lo defendió ayer el empresario Inaciu Iglesias, consejero delegado de Cartonajes Vir, que ayer ofreció una charla dentro del ciclo “Perspectivas de la industria asturiana” del Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA), que está coordinado por los catedráticos Mario Díaz y Tomás Emilio Díaz. “En Asturias (gracias a la formación) tenemos muy buenos asesores, muy buenos técnicos, pero no formamos a los futuros empresarios y los necesitamos”, aseguró Iglesias durante su charla.

Cartonajes Vir celebra sus 90 años de vida, tras haber superado la pandemia del coronavirus con cierta holgura. “No dejamos de trabajar ni un día”, matizó Iglesias. Fabrica unos 20 millones de cajas cada año. Iglesias puso el acento en que su compañía toca campos tan dispares y dispersos como el del diseño gráfico, la fabricación industrial o el transporte, por lo que, aseguró, tienen una visión completa de lo que es la industria asturiana. Dijo Iglesias que el debate sobre el futuro industrial de la región está desenfocado. O, al menos, no está bien orientado. “Lo importante no es qué sector va a ser el futuro, lo importante es cómo se hacen las cosas”. Y puso dos ejemplos. “Ikea vende muebles y eso no es ninguna novedad, lo importante es cómo lo hace. E Inditex vende ropa. La clave es entender lo que necesita el cliente”, dijo.

Más madera. Inaciu Iglesias reprochó a la administración que le pida a los empresarios ser más tecnológicos, cuando en su empresa ya se invierte “mucho en máquinas caras para hacer cartón barato”, y que contribuyan pagando impuestos. Sobre esto último pidió un trato fiscal más equitativo y reclamó a los gobernantes que contraten más inspectores para así destapar el fraude fiscal y evitar subidas de impuestos “para los que cumplimos”. También reclamó menos trabas burocráticas.