Viaje relámpago de Pedro Sánchez a Asturias. El presidente del Gobierno se desplazará a la región en avión privado, donde llegará al mediodía, para desvelar la multimillonaria inversión que ArcelorMittal realizará para descarbonizar sus plantas siderúrgicas asturianas. Protagonizará el evento compartiendo escenario con el presidente del grupo siderúrgico, Lakshmi Mittal, y su hijo, Aditya Mittal, y volverá al avión. No se quedará ni a la comida que los directivos de la multinacional tienen previsto llevar a cabo tras la presentación. Poco más de una hora en tierra. Será un visto y no visto.
La visita de Pedro Sánchez a la región tiene relevancia por dos motivos. Por un lado, por el propio anuncio en sí que despejará el futuro de la industria siderúrgica en la región durante décadas. Al menos, eso es lo que se espera. Y también porque esta será la primera visita del presidente del Gobierno a la región durante esta legislatura. Sus anteriores viajes al Principado habían sido durante la campaña electoral, pero desde entonces no ha vuelto.
El de ArcelorMittal será el segundo anuncio de la semana de Pedro Sánchez relacionado con el reparto de los fondos de recuperación de la UE, ya que se espera que la siderúrgica consiga captar dinero de Bruselas para impulsar su descarbonización en Asturias. El anterior anuncio tuvo lugar ayer y consistió en la presentación del primer Proyecto Europeo para la Recuperación y la Transformación Económica (PERTE) para impulsar el desarrollo del coche eléctrico en España. El proyecto supondrá una inyección pública de 4.295 millones de euros, financiados en su mayoría mediante el fondo de reconstrucción “Next Generation”, y tocará toda la cadena de valor de los coches enchufables. Desde la investigación, el desarrollo y el ensamblaje pasando por la fabricación de las baterías y las extracción de las materias primas que utilizan. La inversión pública movilizará otros 19.000 millones de inversión privada. “Cifras gigantescas porque el reto lo merece. La suma de los apoyos públicos y privados ascenderá a 24.000 millones para uno de los principales proyectos de transformación industrial que situará a nuestro país, si acertamos y lo hacemos bien, en la primera línea mundial”, aseguró Sánchez.
Seguiremos trabajando en desplegar infraestructura de recarga, pero necesitamos el compromiso de las Administraciones para derribar las barreras en la concesión de licencias y permisos, que lastran estas infraestructuras y retrasan su puesta en marcha
En la presentación del PERTE participó el asturiano Adriano Mones, presidente de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (Aedive), que aseguró que “el sector de la automoción y el de la movilidad pueden contribuir a la transformación de la economía española y por eso es necesario que haya iniciativas que refuercen la colaboración público privada porque no podemos hacerlo solos”. Según las cuentas que presentó Mones, España es el octavo país de la UE (de 27) por número de puntos de recarga de acceso público y es el cuarto, tras Alemania, Francia y Países Bajos, con más puntos de recarga rápida. “Seguiremos trabajando en desplegar infraestructura de recarga, pero necesitamos el compromiso de las Administraciones públicas para derribar las barreras en la concesión de licencias y permisos, que lastran estas infraestructuras y retrasan su puesta en marcha, a veces en más de dos años”, dijo.
En principio, el PERTE presentado ayer por Pedro Sánchez no incluye financiación para la fábrica de ensamblaje de coches por la que pujaba el Principado.
