Hay una mina en cada espacio del terreno que pisa el PP de Asturias. El capítulo de ayer del pulso entre la candidata a presidir el Principado, Teresa Mallada, y la presidenta del partido en la región, Mercedes Fernández, volvió a hablar del ritmo de confección y del trámite de aprobación del programa electoral que llevará el partido a las elecciones del día 26. Donde Fernández recordó el jueves que el documento debe ser aprobado en el comité ejecutivo regional, que ella preside, Mallada replicó ayer que a lo mejor no. "Si la dirección nacional tiene a bien dar validez a nuestro programa, que es el del Partido Popular, que es la recopilación de todo lo que vienen realizando el grupo parlamentario y los grupos municipales, quedará listo para su presentación pública", resaltó la candidata en un acto de precampaña.

Mallada y su equipo están "finalizando", añadió ella ayer, un programa que esperan tener listo la próxima semana. Y que se apruebe en Oviedo o en Madrid, finalizó, "no tiene demasiada importancia". La aspirante y sus colaboradores dicen estar en la fase final de la confección de la guía política de los comicios mientras el entorno de la presidenta afirma que a menos de una semana del inicio de la campaña ella y el comité ejecutivo desconocen el contenido del programa. Fernández advirtió a Mallada sin citarla, en su parlamento de apertura del comité del jueves, que es ese órgano de dirección el competente para "aprobar" el texto. Los estatutos del partido, en su artículo 36, utilizan el verbo "elaborar", atribuyendo exactamente al comité la facultad de "elaborar los programas de acción preelectoral y electoral", salvo delegación en una comisión creada al efecto, y la candidata reivindicó el jueves la licitud del derecho que le asiste a intervenir en la confección del documento, como hacen "todos los candidatos", remarcó, y como está haciendo ella.

Lo habitual, en épocas sin bicefalia en el partido, era que de la labor se encargase un equipo de componentes del comité bajo la coordinación de la vicesecretaría general de Estudios y Programas, cuya titular, Beatriz Polledo, forma efectivamente parte del equipo que confecciona el programa además de ser la número cinco de la lista autonómica que encabeza Mallada. Al final del proceso, siempre ha estado la aprobación en el órgano de gobierno del partido, pero es evidente que nada está siendo como siempre. No es habitual que la presidenta y la candidata no sean la misma persona y esa novedad tiene a parte del partido despistado.

En el entorno de la presidenta se preguntan si de aquí a la pegada de carteles Mallada solicitará una reunión extraordinaria para la aprobación, pero de las declaraciones de ayer parece deducirse que en principio no lo tiene previsto.

Mientras se resuelve la incógnita, la ronda de recopilación de aportaciones y exposición de propuestas de su programa electoral llevó ayer a Teresa Mallada a una reunión con representantes de asociaciones de cazadores. Allí expuso su apuesta por la caza como "actividad fundamental para el desarrollo del medio rural" y la convicción de que su gestión ha de quedar encuadrada "dentro de una dirección general de medio natural que englobe la caza, la pesca, el sector forestal y los espacios naturales". Optaría también por auspiciar un "cambio de la ley y del reglamento de caza con una revisión a la baja del canon cinegético y una ampliación del plazo de adjudicación de los cotos", así como por convertir en especie cinegética "al lobo y la cabra hispánica".