Madrid, Agencias

El secretario de comunicación del PP, Esteban González Pons, acusó al Gobierno de ser el responsable de la filtración de una «pieza policial inservible» para dañar a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y al principal partido de la oposición.

González Pons afirmó que la grabación en la que Álvaro Pérez, «el Bigotes», dice haber regalado bolsos de lujo a la regidora «no forma parte del sumario», ni ha dado lugar «a ninguna investigación», y ha dicho que estaba «guardada» hasta que «una mano negra», siete meses después de que se produjera, «la saca de un cajón y la filtra a un periódico» con la «intención» de «dañar» al PP. Preguntado por si Barberá recibió regalos de responsables de la trama «Gürtel», ha indicado que esa «supuesta» grabación se produjo «en plenas Navidades» y ha dicho que «todo el mundo recibe regalos en Navidad».

El dirigente del PP dice que su partido «está muy enfadado» y que «cuando el Gobierno filtra con intencionalidad política piezas policiales inservibles para dañar a la oposición se está rompiendo algún consenso básico democrático». «Nunca el Gobierno había utilizado a la Policía y a la Fiscalía para perseguir a la oposición, para conseguir que la oposición no tenga debate político», añadió.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, trasladó a los sindicatos policiales su «preocupación por la utilización política de la Policía judicial» y les expuso las sospechas de su partido acerca de que las filtraciones del «caso Gürtel» podrían tener su origen en el ámbito del Ministerio del Interior o de la Fiscalía.

De Cospedal, que mantuvo reuniones con la Confederación Española de la Policía (CEP), el Sindicato Unificado de la Policía (SUP) y el Sindicato Profesional de la Policía (SPP), les explicó que el PP exigirá a los ministros de Interior y de Justicia que no se produzcan más filtraciones de conversaciones privadas.

Los representantes de los sindicatos policiales pidieron al PP que no mezcle a la Policía en la «pelea política» con el Gobierno. Los populares advirtieron de que no permitirán que los mandos políticos del Ministerio del Interior, de la Fiscalía General «o quien sea» utilicen «abusivamente los poderes» del Estado de derecho para «perjudicar a las personas o a un partido».

La Fiscalía Anticorrupción ha decidido presentar una denuncia por las últimas filtraciones relativas al regalo de bolsos de lujo a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá. La denuncia se incorporará a las que ya investiga un Juzgado de Madrid.

El portavoz del PP en el Senado, Pío García Escudero, afirmó que a principios de 2003 recibió un reloj «caro» que le envió Francisco Correa, a quien se lo devolvió «inmediatamente», y consideró que todos los políticos reciben regalos, pero hay que saber «dónde está el límite». Mientras, el PSOE preguntó a Barberá si aceptaría regalos de la mafia por ser Navidad.

Por otra parte, el senador y tesorero del PP, Luis Bárcenas, comparece a las diez y media de esta mañana ante el Tribunal Supremo como «imputado provisional» para defenderse de las acusaciones que se le atribuyen, la comisión de presuntos delitos de cohecho y de fraude fiscal, y explicar «todo» sobre sus contactos con la trama del «caso Gürtel».

Bárcenas acudirá para cumplir así uno de los principales propósitos que se marcó nada más asumir el Supremo la investigación: la de la comparecencia voluntaria para explicar su versión de los hechos. El tesorero está convencido de su inocencia, de modo que mostrará la documentación que, a su juicio, acredita que todo su patrimonio y sus ingresos están justificados.

La comparecencia del tesorero del PP se celebrará, por tanto, sin que el Supremo haya cursado el suplicatorio al Senado. El juez podrá decidir si archiva la causa o si continúa instruyéndola, lo que ya significaría la petición del suplicatorio y la consiguiente dimisión temporal del tesorero del PP.

El Supremo se negó a aplazar la comparecencia de Jesús Merino prevista para mañana.