El líder del PP, Mariano Rajoy, y el presidente catalán, José Montilla, han evidenciado en su reunión de hoy sus diferencias respecto al Estatut, ya que Rajoy ha tildado de "muy peligrosa" la petición de Montilla de renovar el Tribunal Constitucional (TC) antes de un fallo del Estatut que ve "urgente".

A petición de Montilla, el presidente del PP y el líder de los socialistas catalanes se han reunido en la sede del gobierno catalán durante cerca de dos horas, un encuentro inédito al que también han acudido, por parte del PP, la líder en Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, y el coordinador de Presidencia, Jorge Moragas, y, por parte del ejecutivo catalán, el secretario general de Presidencia, Isaías Taboas, y la secretaria del Govern, Laia Bonet.

El encuentro, que ha sido calificado de cordial por Rajoy y Montilla, se ha celebrado inicialmente entre los seis dirigentes pero, al final, Montilla y Rajoy han conversado a solas por expreso deseo del presidente de la Generalitat. Es en ese momento cuando han hablado del Estatut.

Posteriormente, Montilla y Rajoy han comparecido por separado en la sala de prensa del Palau de la Generalitat, en donde para la ocasión se ha situado una bandera española junto a otra catalana, además de un atril especial.

"Coincido con (José Luis) Rodríguez Zapatero en que el Tribunal Constitucional tiene plena legitimidad para resolver este asunto y en la inconveniencia de cambiarlo ahora mismo. Unir a una sentencia la renovación del Constitucional es muy peligro para la justicia", ha subrayado Rajoy, que ha confirmado lo esperado, que no piensa retirar el recurso del PP sobre el Estatuto catalán.

Rajoy se ha preguntado "qué credibilidad y confianza" podría transmitir a la ciudadanía si retirase ahora, "por un problema político", el recurso al Estatut.

Por contra, Rajoy ha instado a Montilla a que haga "pedagogía" en Cataluña sobre la Constitución Española -"una de las pocas que no ha unido" a los españoles- y la arquitectura institucional del Estado.

"Le he dicho al presidente Montilla que nosotros respetaremos y acataremos las decisiones que adopte el TC, que lo hemos hecho siempre, nos gusten o no sus resoluciones, y creemos que no tenemos otra alternativa porque no sería bueno una alternativa a respetar o acatar las sentencias del TC", ha explicado.

Rajoy ha echado la culpa al PSOE y a Zapatero de que el TC no se haya renovado ya y ha recordado que, tras su conversación con el presidente del Gobierno el 14 de octubre de 2008, no se logró desbloquear la renovación del TC porque los socialistas no aceptaron en el Senado los dos nombres propuestos por las Comunidades Autónomas del PP.

"Pero coincido con Rodríguez Zapatero en que el TC tiene plena legitimidad para resolver este asunto y en la inconveniencia de cambiarlo ahora mismo. Unir a una sentencia la renovación del TC es muy peligro para la justicia", ha insistido Rajoy.

El líder del PP ha dicho que él no quiere "engañar a nadie" y que está por que el TC dicte una sentencia sobre el Estatut de una forma "urgente".

Rajoy se ha mostrado abierto a estudiar la propuesta de reforma de la Ley Orgánica del TC que el tripartito quiere trasladar al Senado, pero sobre todo porque él es un "entusiasta" de introducir el recurso previo de inconstitucional, sistema que evitaría retocar un estatuto tras ser refrendado por la ciudadanía, como es el caso catalán.

Pese a que el encuentro ha certificado posiciones diametralmente opuestas entre Rajoy y Montilla, el líder del PP ha dado las gracias públicamente al presidente de la Generalitat por su invitación al diálogo, en un encuentro en el que ha dicho sentirse "muy cómodo".

Rajoy ha informado también que, tal como era su deseo, han analizado la situación económica y ha afirmado: "Quiero colaborar para que Cataluña vuelva a convertirse en motor decisivo de la economía española, lo que es absolutamente factible porque el espíritu emprendedor está en la esencia de Cataluña".