El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha subrayado hoy que el nombre de Luis Bárcenas "no está en la lista" de la llamada amnistía fiscal, si bien se ha acogido al secreto tributario que protege a los contribuyentes para justificar no dar más detalles tributarios del extesorero del PP.

En su réplica a los grupos parlamentarios durante su comparecencia en el Congreso, Montoro ha ratificado el contenido del comunicado emitido la semana pasada por la Agencia Tributaria que aseguraba que Bárcenas no se había beneficiado del proceso de regularización extraordinario, pero no aclaraba si se había acogido a algún otro mecanismo tributario a su nombre o de alguna empresa.

"En la lista no aparece" el nombre de Bárcenas, ha zanjado Montoro, quien además ha vuelto a recordar que el extesorero dejó el Partido Popular en el año 2009.

El ministro ha insistido en que la información tributaria no puede ser facilitada a terceros, a menos que el propio Bárcenas o su abogado renuncien a esa protección.

"Es evidente que si Barcenas, o cualquier otro contribuyente, no aparece en el listado, no puedo traer una información de la que en este momento carezco", ha indicado tras reiterar que, en todo caso, es el propio Bárcenas, a través de su abogado, el que "ha levantado el secreto" que contempla la Ley General Tributaria.

Además, ha insistido en que no tiene relevancia penal que se acoja a la regularización, ya que la amnistía no exime de responsabilidades a quien está incurso en un procedimiento judicial o administrativo.

Ha recordado que el Gobierno pretende modificar ese punto de la Ley Tributaria para que se puedan hacer públicos los nombres de los defraudadores fiscales "con mucha más propiedad y capacidad" porque "en este momento la transparencia es absolutamente clave".

El titular de Hacienda ha criticado las declaraciones políticas "muy graves" que se han vertido y que demuestra, ha dicho, que "todo es gratis" y que se pueden decir todo tipo de cosas "sin consecuencias".

Una critica que ha extendido a los medios de comunicación que lanzan, ha apuntado, "infamias", "insinuaciones", sirven de "vehículo a campañas sucias" y lo hacen "sin pestañear".

"Esto hace mucho daño al sistema y a la democracia", ha subrayado antes de mostrar su esperanza en que el "rigor vuelva algún día".

El ministro ha insistido, por último, en defender la amnistía fiscal que impulsó su departamento y que ha permitido mejorar los ingresos tributarios.

Según Montoro, la regularización ha sido una medida "extraordinaria", "excepcional y no repetible" que se ha adoptado en un año, el 2012, donde el colapso de España era una realidad.

"No entiendo que cuando conseguimos una mayor recaudación ustedes dicen que no hemos beneficiado a nadie, es que es genial", ha ironizado el ministro, para quien la gestión política "se mide con resultados" y los suyos han sido "traer más dinero" y "más equidad" a la Hacienda Pública.

Ha contrapuesto además esa política a la de "otros" que bajo la "gran bóveda del Gobierno de izquierdas" tomaron medidas que provocaron una reducción de la recaudación e incluso permitieron que algunas empresas "no pagaran impuestos" e hicieron leyes posteriores para que "quedaran dentro de la legalidad".

Montoro ha dicho ser el "responsable político" de la respuesta que ha dado Hacienda sobre Bárcenas, y ha reiterado que la amnistía "no limpia el delito".

Además, ha asegurado que no hay país que haya conseguido, como España, incrementar su recaudación tributaria un 4,7 % con la economía cayendo.