Los dos jóvenes pasaron a la zona del accidente para orinar, declara el herido
«Mi hijo tenía golpes, lo arrastraron y lo aventaron al agua», afirma el padre
M. C.
W. P. D. V. pudo recuperarse ayer suficientemente para prestar declaración ante la Policía sobre lo que recordaba de lo que había sucedido en la madrugada del domingo. Según la Policía, W. P. D. V. afirmó que en el lugar de los hechos estaban solos él y su hermano en el momento en el que se produjo el trágico desenlace. Habían entrado al Fomentín para orinar, explicó en su declaración.
Pese a todo, el padre de J. A. D. V. aún sospechaba ayer que podía haber un ajuste de cuentas detrás de la muerte de su hijo mayor. «Mi hijo tenía golpes en la cara. Lo arrastraron y lo aventaron al agua», señaló Jaime Dávalos a LA NUEVA ESPAÑA en el tanatorio. Su hijo, W. P. D. V., que «también tenía golpes en la cara» había dicho a la familia que creía que él y su hermano habían sido atacados por la espalda por terceras personas, lo que alentó las sospechas de la familia de que la muerte del hijo mayor pudiera deberse a un ajuste de cuentas.
Desde hace dos años W. P. D. V. estaba amenazado por un grupo de dominicanos con los que había tenido disputas «entre ellos, un portero de discoteca», señaló el padre, convencido de que la muerte de su hijo no fue fortuita, pese a que los datos de los que dispone la Policía apuntan en otra dirección. «No vamos a dejar que esto quede impune, pedimos que se haga justicia y vamos a llegar hasta donde tengamos que llegar».
Jaime Dávalos indicó que «el juez no ha permitido incinerar (el cadáver de su hijo), porque parece que va a seguir el proceso de investigación». J. A. D. V. será enterrado esta tarde en el cementerio de Deva, tras el funeral que se celebrará en la parroquia del Corazón de María, a las cinco de la tarde, y la familia espera que pueda trasladarse hasta la parroquia el hermano herido, aunque W. P. D. V. tendrá que regresar a continuación al Hospital de Jove, donde se encuentra ingresado.
J. A. D. V. trabajaba como pintor de viviendas y edificios. Su hermano, W. P. D. V., que es jugador del equipo de fútbol juvenil A del Colegio de la Inmaculada, trabaja como albañil, señaló la familia, que reside en una calle próxima al Centro Comercial Los Fresnos.
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