R. VALLE / J. A. ARDURA

José Manuel Sariego, secretario general del PSOE gijonés y alcalde en funciones de la ciudad por las vacaciones de Paz Fernández Felgueroso, tachaba ayer de «barbaridad como la copa de un pino» la iniciativa del Partido Popular de solicitar que el fiscal general del Estado abra una investigación sobre los sobrecostes de la obra de ampliación de El Musel.

«El túnel de Fabares, aquí cerquita, en Villaviciosa, se presupuestó en 80 millones de euros y acabó costando 140: un 75% más. El responsable de esa obra en su día era el PP con el ministro Cascos a su cabeza y nadie pidió la intervención de la fiscalía», argumentaba ayer Sariego, para quien «cualquier persona sensata sabe que una obra portuaria tiene una complejidad técnica muy superior a un túnel y que el acierto en la previsión presupuestaria de este tipo de obras suele ser infrecuente». La obra de El Musel se adjudicó en 579,24 millones de euros (con IVA incluido) y hay que cubrir unos sobrecostes de 250 millones de euros. El edil gijonés entiende que la situación que se vive en el puerto local no es diferente a la que se generó con proyectos similares en Bilbao, Barcelona o Valencia.

Sariego defiende que hay una gran diferencia entre el desacierto en la gestión de la obra y la existencia de irregularidades que motiven una investigación. Desacierto que asume como real y que considera fue el motivo de la petición de una reflexión por parte del ministro José Blanco al referirse a las obras del puerto gijonés. «Las grandes infraestructuras siempre sufren ese tipo de desaciertos en las previsiones y eso creo que lo sabe perfectamente el Ministro. Otra cosa es que no nos manifestamos satisfechos con estos desaciertos pero que quede claro que estamos hablando de desacierto de la gestión, no de irregularidades. Esa diferencia me parece básica para poder reprochar al Partido Popular que hable de fiscalías y comisiones de investigación. Aquí nadie, absolutamente nadie, se metió dinero en el bolso», sentenció con contundencia el líder del PSOE gijonés.

Y es que para Sariego la polémica por el sobrecoste de El Musel no tiene más base que el intento de la oposición popular de oscurecer un logro de los socialistas en Asturias. El alcalde en funciones tiene claro que «en cuarenta años nadie se acordará de cuál fue el presupuesto inicial y el final de la ampliación de El Musel. Estas polémicas me parecen exageradas porque, en el fondo, ocultan la importancia de una obra clave para el desarrollo económico e industrial de Asturias. Me da la impresión de que lo que realmente molesta a la derecha es que un gobierno socialista presidido por Tini Areces sea capaz de lograr la ampliación del puerto de El Musel, la construcción del hospital universitario y la culminación de la variante de Pajares».

El PP volvió a valorar ayer el problema de los sobrecostes para anunciar que sopesa focalizar en Asturias el grueso de las actuaciones encaminadas a esclarecer lo sucedido. Los populares han manifestado su intención de pedir una comparecencia del ministro de Fomento para clarificar la posición de su departamento ante el desfase económico. Bloque por Asturies, socio minoritario en el Gobierno regional, pide una comisión de investigación en la Junta, una posibilidad que los populares no descartan.