R. VALLE

Primero fueron los vehículos eléctricos y ahora las energías renovables, y más en concreto la energía eólica marina. Gijón quiere estar a la cabeza mundial de la investigación y el desarrollo de aplicaciones que puedan abrir mercados internacionales y ampliar su tejido productivo. Para ello se ha convertido en un «laboratorio viviente» en la experimentación con coches eléctricos y ahora busca ubicar en su «milla del conocimiento» un centro de referencia en la investigación sobre energías eólicas. Este «cluster» de Energía, Medio Ambiente y Cambio Climático es uno de los dos proyectos de I+D+I que presenta la Universidad de Oviedo en su plan para conseguir el sello de Campus de Excelencia Internacional. Y el más íntimamente ligado con Gijón.

José María Pérez, concejal de Promoción Económica y portavoz de la Junta de Gobierno, recordaba ayer que fue el propio Ayuntamiento el que planteó esta opción estratégica al Rectorado. Y no se quedaron sólo en darle la idea. El Ayuntamiento pagó a una consultora externa para que elaborara un informe sobre las opciones de Gijón para posicionarse en el sector de generación de energías procedentes de fuentes renovables, ha puesto su Parque Tecnológico y Científico a disposición de la causa y ha buscado el apoyo al proyecto de empresas importantes de ámbito internacional. El equipo municipal reclutó las adhesiones a la iniciativa de cerca de una veintena de firmas, entre ellas algunas tan potentes como Acciona, EDP, Duro Felguera y la propia Autoridad Portuaria de Gijón.

La idea es aunar los esfuerzos de la Universidad, las administraciones públicas y el empresariado privado para trabajar en la investigación de mejoras aplicables a la producción en el campo de aerogeneradores en el mar. El proyecto incluye la construcción de un laboratorio en las cercanías de la costa gijonesa que serviría de campo de pruebas para instalar estos «molinos» en alta mar. Esta plataforma podría estar operativa ya el próximo año.

José María Pérez reivindicaba ayer el trabajo municipal en esta iniciativa sobre energías renovables, al tiempo que se felicitaba por la buena acogida que tuvo desde la Universidad de Oviedo, que incluyó literalmente una parte del documento presentado por el Ayuntamiento en su expediente al Ministerio para conseguir la calificación de Campus de Excelencia y los recursos económicos asociados. El gobierno gijonés también dio su apoyo al plan de reordenación de espacios en los campus que ha diseñado el equipo de Vicente Gotor y al «cluster» de Biomedicina y Salud para desarrollar en La Cadellada. Ahora queda por ver si el Gobierno nacional aprueba las iniciativas de la Universidad de Oviedo y financia el proyecto gijonés.