M. C.

«Si Emilio Menéndez dice que el obstáculo para vender la EBHI son los salarios, que se prepare, porque no los vamos a bajar». Ésta es la respuesta que han querido trasladar dos representantes de la sección sindical de UGT en EBHISA, tras la asamblea que la citada sección mantuvo el pasado 20 de abril a raíz de que el presidente de la Autoridad Portuaria desvelara que los sueldos en la terminal granelera «llegan a los 90.000 euros» anuales y considerara que la elevada masa salarial de la empresa dificultaba su privatización.

En una nota UGT dice a Menéndez: «Sería conveniente para evaluar los resultados de su gestión en el Puerto (si la hubiera) que dedicara unos minutos a conocer la política portuaria y la historia de EBHI para evitar esas constantes incontinencias verbales y ofensivas contra los trabajadores, ya que todos los conceptos económicos y sociales conseguidos han sido objeto de negociación y por tanto no hay nada de qué avergonzarse».

A esto, los representantes sindicales citados añaden que negociación es lo que falta con los actuales gestores portuarios y no sólo con los trabajadores, sino que «hasta ahora la Autoridad Portuaria no imponía, acordaba en el consejo con Arcelor, Tudela Veguín y HC, pero ahora les imponen las tarifas y los clientes pueden dejar de serlo».

Señalan que «el consejo de la EBHI está mayoritariamente puesto por el Gobierno regional y la Autoridad Portuaria, y van a levantar el brazo en las votaciones porque menos el director del Puerto, los demás no saben de qué va», refiriéndose al presidente del Puerto, Emilio Menéndez, que es interventor; a la consejera de Fomento, Isabel Marqués, y al viceconsejero de Infraestructuras, Juan Vega, sin experiencia previa portuaria; al ingeniero Javier González Martínez, director de Obras Hidráulicas del Principado, y a Rosario Cabal Redondo, asesora fiscal y apoderada de sociedades inmobiliarias. Son, junto a Julio de la Cueva, funcionario de Puertos del Estado y actual director de El Musel, los representantes del Puerto en EBHISA.

Los sindicalistas también cuestionan que se quiera imponer la jubilación obligatoria en EBHISA cuando la Autoridad Portuaria la preside «un hombre de 69 años, funcionario, que pasó toda la vida en un despacho». El sindicato también arremetió contra el presidente de Puertos del Estado, Pedro Llorca, que en el Congreso dijo que EBHISA debía 8 millones de euros a la Autoridad Portuaria, cifra muy superior a la real.