La Guardia Civil de Gijón se incautó el pasado viernes de 244 piezas de bisutería que dos comerciantes habían puesto a la venta en sendos puestos instalados en la Feria Internacional de Muestras de Asturias y que estaban elaboradas con semillas que contenían abrina, una sustancia muy tóxica y peligrosa que puede incluso provocar la muerte.

"Se han documentado casos en los que se ha producido el fallecimiento de una persona por el simple pinchazo en un dedo con las semillas de los abalorios", insisten desde la Guardia Civil de Gijón añadiendo que el consumo accidental de esta sustancia puede provocar "estados de coma, cuadros de delirio y alucinaciones". Una sola semilla bastaría, añaden desde la Benemérita, para matar a un niño.

Durante una visita al recinto ferial los agentes del Servicio Fiscal de la Comandancia de la Guardia Civil encargados de las inspecciones rutinarias en los puestos de venta ambulante se encontraron con estas 244 piezas de bisutería -pulseras, colgantes, llaveros, rosarios y collares- elaboradas con la semilla tóxica. Además también se incautaron de un millar de semillas sueltas que tenían en su poder los propietarios de los dos stands que fueron sometidos a la inspección. En ambos casos los vendedores aseguraron desconocer lo peligroso de las semillas, que fueron entregadas ayer a la Dirección General de Consumo de la Consejería de Sanidad del Principado de Asturias.

La Guardia Civil, por su parte, elaboró dos actas de denuncia contra los comerciantes, a los que se acusa de infringir el Real Decreto sobre seguridad general de productos.

Procedencia

Las semillas tóxicas localizadas en Gijón -la abrina y el huayruro-, provienen, tal y como explicó ayer una portavoz de la Benemérita, de "una liana trepadora nativa de las montañas de India e Indochina que también se puede encontrar en África o América".

"Su fruto es una vaina globosa normalmente rojiza con una mancha oscura en el extremo. Estas semillas están muy valoradas en joyería por sus vivos colores, el rojo y el negro", afirmaron desde la Comandancia gijonesa.

En algunos países los abalorios elaborados con este tipo de semillas están completamente prohibidos y su comercialización está castigada con la imposición de importantes sanciones económicas. En España la venta de este tipo de semillas peligrosas se detectó hace apenas unas semanas por lo que las fuerzas de seguridad aumentaron desde entonces los controles como el establecido en Gijón para evitar que las semillas puedan comercializarse. Aún no hay, eso sí, una regulación al respecto de la venta de estos abalorios.