Cada decisión que adopta el Real Grupo de Cultura Covadonga, desde la entrada de Antonio Corripio como presidente de la entidad, llega acompañada de polémica. Y en este caso no ha habido excepción, a juzgar por el revuelo causado en las redes sociales tras la concesión del servicio de hostelería a la oferta conjunta presentada bajo la denominación de La Buena Vida-La Tonada, SL. Un concurso que desde la directiva se creó para dar más claridad a esta nueva etapa pero que para otros pone en entredicho la transparencia del proceso.

Los reproches hacia la directiva grupista llegan en torno a la figura de César Telenti, socio de esta entidad deportiva desde hace más de cuatro décadas y que durante la campaña a la presidencia se posicionó en las filas del entonces candidato Antonio Corripio, hoy presidente, y que en la actualidad es asesor de la Comisión de Comunicación del Grupo Covadonga.

Muchos usuarios de Facebook fueron los que a raíz de la concesión de la cafetería situaron en el entorno de La Tonada, SL a César Telenti a través de las redes sociales. Una acusación que formularon junto a un extracto del "perfil del contratante", el instrumento que tiene este colectivo para asegurar la transparencia y la libre concurrencia en las licitaciones que inician. "No podrán participar como licitadores los miembros de la Junta Directiva, equipo de dirección, ni las personas que mantengan relaciones de parentesco o análogas circunstancias que pudieren dar lugar a causa de abstención de los miembros de la misma", rezan las condiciones.

"Mi relación laboral con La Tonada, SL es única y exclusivamente de asesoría en comunicación y planificación de campañas promocionales en medios de comunicación pero no formo parte de la empresa", aseguró César Telenti ajeno a cualquier responsabilidad con las denuncias aparecidas en redes sociales tras la adjudicación del servicio de hostelería.

Respecto a sus relaciones con el Grupo Covadonga, Telenti sostiene que es un mero asesor en la Comisión de Comunicación de la entidad que se reúne cada dos meses y medio. "Sólo planteo pautas de cómo trabajar la comunicación interna, la información que genera el Grupo para sus socios", sostiene. Un área, la de comunicación, que "nada tiene que ver" con el proceso en el concurso de adjudicación del servicio de hostelería.

"La única opinión válida es la de la Junta Directiva que hace público un concurso, con un pliego de condiciones que reúnen unas bases y al que se presentaron dos empresas pero que estaba abierto a cualquiera", incide. Una vez conocidos los proyectos presentados por los licitantes "se emite una decisión de acuerdo con lo que suponga un beneficio mayor para el club", recuerda Telenti, no sin reafirmarse en que fue un proceso y una conclusión del concurso ajena a su persona. "No he tenido nada que ver", incide. "La situación parece obvia, y cualquier otra realidad es negar la evidencia de la realidad", concluye César Telenti.