La historia está lejos de acabar. El taller mecánico al que los miembros de la asociación Fauna Urbana enviaron el pasado miércoles la furgoneta en la que apareció un reptil que se escondió en el conducto de ventilación al ver al conductor retendrá durante al menos tres días el vehículo a la espera de que la serpiente salga del interior del motor. Para hacer este "trance" más sencillo Fauna Urbana ha colocado en el interior del turismo un ratón con el que pretenden tentar al reptil.

"Nos dijeron en el taller que no quieren meterle mano a la furgoneta al no saber si la serpiente puede ser venenosa", relataron esta mañana desde Fauna Urbana. El gijonés que conducía el vehículo se llevó un susto tremendo cuando abrió el vehículo, que se encontraba aparcado en la calle Francisco de Paula Jovellanos, a pocos metros de la Jefatura de la Policía Local.

"Estaba asustado y no podíamos hacer nada. Como no encontramos a la serpiente, tuvimos que llevar el coche al taller con una grúa para que allí lo desmonten hoy por la tarde y vean que reptil es", explicó entonces uno de los portavoces del colectivo animalista. El problema, aseguran desde Fauna Urbana, es que "si es una víbora y el conductor enciende el vehículo y sale corre mucho peligro, tenemos que asegurarnos bien de que hay ahí dentro".