A nadie se le escapa la necesidad de mejorar las urgencias de Cabueñes, cuyas estrecheces resultan demoledoras para la atención. De ahí que será de las primeras intervenciones que lucirán en la ampliación. Entre las ideas que lo definirán es que se diseñará con recursos de reserva que se podrán activar en periodos de alta demanda para reducir las esperas, y con equipamiento diagnóstico de imagen complementario. Habrá dos salas de clasificación de pacientes, 40 boxes y 17 sillones (ahora hay 26 en total), y una zona de observación para un máximo de 30 pacientes (ahora pueden llegar a ser 15). Además, dos consultas de especialidades, tres de traumatología y dos salas de exploración ginecológica.

En la primera fase de la obra de Cabueñes se incluye también la actuación sobre las consultas externas, que se van a aumentar para incorporar a Cabueñes las que están en la Casa del Mar y el ambulatorio de Pumarín. Eso, dicen los expertos "facilitará la circulación de personal y pacientes, se podrá incrementar la alta resolución y se logrará mayor eficiencia en el uso de recursos".

Por lo que respecta a la reordenación de tráficos, circulaciones y aparcamientos en todo el entorno del hospital, Francisco del Busto admitió que se mantiene la pretensión de mejorar la conexión con la autopista de toda la zona. "Por la zona de Deva tiene que ir, probablemente, una conexión con la ronda porque este es un hospital universitario que generará cada vez más sinergias, está en la milla del conocimiento, la Laboral... es una zona de desarrollo económico y las salidas a la autipista tienen que mejorar", comentó Del Busto. Al hospital se le ha diseñado una nueva ronda de circunvalación y junto al bloque nuevo quirúrgico y de urgencias la previsión es que se levante un parking en alturas "porque a Cabueñes le falta aparcamiento y puede que no sea conveniente que haya tanto en superficie", dijo. Se verá más adelante a qué modalidad de parking se recurre.