La mujer procesada por la supuesta estafa de 60.000 euros a una pareja, haciéndose pasar por agente inmobiliario, ha sido condenada a una pena de prisión de tres años y seis meses de cárcel y al pago de una indemnización de 60.688 euros por la sección octava de la Audiencia Provincial. Una sentencia que la defensa de esta mujer, sobre la que pesan antecedentes, recurrirá.

La condenada, S. I. F. reconoció que la pareja denunciante le había entregado ese importe para participar en subastas inmobiliarias en su nombre pero que, posteriormente les reintegró la cantidad aunque no tenía recibo para constatar su versión. En contra, la pareja afectada que negó esta declaración durante el juicio.