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El Lauredal alcanzó en diez ocasiones en un año el nivel de alerta por contaminación

La campaña de medición del Principado registró en diciembre once días consecutivos en los que se superaron los límites, cuando para que salte la alarma bastan tres

La campaña de medición de partículas en el aire inferiores a 10 micras (PM 10), que el Principado realizó en El Lauredal durante un año, ha constatado que este barrio del oeste de Gijón es un punto negro de contaminación, con 89 días en los que se superaron los máximos permitidos por la normativa española. En diez ocasiones a lo largo de ese año se dieron las circunstancias para que se hubiera decretado una alerta por contaminación, en base a los requisitos que establece el nuevo protocolo de actuación que el Principado acaba de sacar a información pública. Con posterioridad al pasado 30 de septiembre (fecha en la que el Principado retiró de El Lauredal su equipo de medición portátil) la unidad móvil instalada en ese barrio por el Ayuntamiento registró otros dos periodos en los que se dieron las circunstancias previstas en una alerta de grado máximo.

El nuevo protocolo, sin embargo, no se activará a pesar de que se repitan las malas condiciones en ese barrio, debido a que sólo está previsto que se decreten alertas en base a las mediciones de las 6 estaciones fijas de control del Principado en Gijón, ninguna de ellas en El Lauredal. Las mediciones en este barrio se realizaron durante un año con un equipo portátil del Principado en una campaña que ya ha concluido. Aún así, las mediciones siguen, ya que el Ayuntamiento ha estacionado en El Lauredal su nueva unidad móvil para medir la contaminación.

El protocolo establece tres niveles de alerta cuando se den dos circunstancias. Por un lado, que al menos en una estación fija de control se superen tres días consecutivos la media diaria de 45 microgramos de PM 10 por m3 de aire (nivel de alerta 0); durante tres días consecutivos los 50 microgramos de PM 10 o los 35 de PM 2,5 (nivel 1) o durante tres días de cinco consecutivos los 75 microgramos de PM 10 o los 50 de PM 2,5 (nivel 2). El segundo requisito es que se prevea que se mantengan las malas condiciones atmosféricas para dispersar la contaminación. El protocolo prevé medidas de restricción del tráfico y de la actividad industrial en distinto grado, en función del tipo de alerta.

La campaña del Principado se desarrolló entre el 11 de octubre de 2016 y el 30 de septiembre de 2017 y fue efectuada con un captador en discontinuo de partículas en suspensión, instalado en las dependencias de Emulsa en el parque de El Lauredal. La instalación allí de este equipo portátil fue presentado el pasado 24 de agosto por la directora general de Control Ambiental del Principado, Elena Marañón, quien explicó que ese equipo portátil realiza mediciones cada 24 horas, mediante el método gravimétrico, el oficial para el control de la contaminación. El Principado explicó entonces que había adquirido cuatro de esos equipos portátiles para calibrar con ellos la precisión de los equipos instalados en la red de estaciones fijas de control, que efectúan mediciones horarias.

Durante los más de once meses en los que se desarrolló la campaña de PM 10 en El Lauredal, se validaron las mediciones de 296 días, con medias diarias que oscilaron entre los 8,7 y los 127 microgramos de PM 10 por m3 de aire. En ese periodo se produjeron al menos 10 ocasiones en las que se cumplieron los requisitos que marca el nuevo protocolo para activar una alerta -en tres ocasiones de nivel 2-, con series de hasta 11 días consecutivos con cantidades de polución suficientes para una alerta de grado máximo. La serie de 11 días con alta contaminación se dio entre el 3 y el 13 de diciembre de 2016, nueve de ellos con medias diarias entre 77,1 y 127 microgramos de PM 10.

Las diez ocasiones en las que se registraron cuatro días consecutivos con medias elevadas fueron: En 2016 del 22 al 26 de octubre; del 29 de octubre al 4 de noviembre; del 3 al 13 de diciembre y del 31 de diciembre al 3 de enero de 2017. En 2017 la situación se dio del 19 al 24 de enero; del 14 al 18 de febrero; del 7 al 13 de marzo; del 27 al 31 de marzo; del 18 al 21 de junio y del 23 al 29 de septiembre. A todo esto se suman varias ocasiones más con elevada de contaminación durante tres días consecutivos, lo que no quiere decir que necesariamente se dieran las condiciones para una alerta, dado que eso también depende de las previsiones meteorológicas.

La mala calidad del aire en El Lauredal se mantiene, según los datos de la unidad móvil del Ayuntamiento de Gijón, que reflejan que desde septiembre se produjeron tres periodos en los que se dieron las circunstancias que el nuevo protocolo establece para decretar una alerta, en dos de esas tres ocasiones con un nivel 2: Entre el 23 y el 29 de septiembre (coincidente con la registrada por el equipo gravimétrico del Principado); entre el 7 y el 15 de octubre y entre el 22 y el 27 de octubre.

Se da la circunstancia de que en el tiempo en el que se solaparon las mediciones de la unidad portátil del Principado y de la del Ayuntamiento, los registros efectuados por ambas no fueron coincidentes.

La Coordinadora Ecologista de Asturias denunció ayer que el pasado domingo se alcanzó, a las diez de la noche, un pico de 417 microgramos de PM 10 por metro cúbico de aire en El Lauredal y a la hora siguiente saltó un pico de 115 microgramos en la estación de control de Santa Bárbara, ubicada al suroeste de Gijón.

Desde que inició sus mediciones la unidad móvil del Ayuntamiento, se han alcanzado en diversas ocasiones picos horarios superiores a los 400 microgramos de PM 10, llegando a los 690 a las 7 de la mañana del 12 de agosto. En varias ocasiones el barrio ha estado sometido a más de diez horas consecutivas de alta contaminación por partículas. La legislación española establece como tope una media anual de 40 microgramos de PM 10 y un límite de 35 días al año en los que se superen los 50 microgramos de media diaria. Los ecologistas insisten en que la Organización Mundial de la Salud recomienda como límite una media anual de 20 microgramos y que no se supere ningún día del año la media diaria de 50.

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