Gijón cuenta desde esta mañana con un belén acuático. Un grupo de amigos fieles de los baños de fin de semana en la bahía de San Lorenzo se echó ayer a la mar para depositar en el fondo, frente al Cerro de Santa Catalina, un singular nacimiento creado con piedras pintadas: San José, la Virgen, el Niño Jesús, el buey, la mula y los tres Reyes Magos.

"Igual que se hacen belenes de cumbres pensamos que se podían hacer de fondos", explica Marisa Montero, la impulsora de una singular iniciativa que ayer reunió a trece nadadores en la playa gijonesa. La intención es la de mantener esta tradición en años venideros, porque "para eso tenemos una ciudad con mar".