La industria creativa está a punto de echar a volar, pero aún debe soltar lastre. Un estudio de diagnóstico del estado del sector de la industria cultural y creativa en Gijón, realizado por una empresa vasca a petición del Ayuntamiento, ha desvelado varias carencias y necesidades urgentes para poder crecer.
En primer lugar, tal y como señaló Nekane Basterretxea, el sector está concentrado mayoritariamente en actividades de diseño, nuevas tecnologías, publicidad y arte, con una estructura basada en empresas jóvenes (de menos de 7 años), con comunidades de bienes y autónomos de muy poco tamaño (de entre 1 y 5 personas), con un volumen de negocio de entre 50.000 y 100.000 euros al año. Los principales problemas a los que se enfrentan estas empresas son "una demanda insuficiente de sus servicios", destacó Basterretxea, junto con "una falta de gestión profesional e insuficiente orientación al mercado": Por eso, se hace urgente poner en marcha iniciativas y espacios que posibiliten la visualización del sector y la conexión entre creadores para generar más demanda.
Se trata, como resumió gráficamente la emprendedora María Rilla, de que "las empresas tienen que pensar en contratar los servicios de profesionales creativos, desde el mundo de la sidra hasta el interiorismo, el diseño gráfico o el propio sector público; es necesario que se piense en el sector creativo como generador de valor en el que hay que invertir", recalcó Rilla, de tal modo que "tengamos una nueva identidad innovadora, que los pequeños negocios vayan incorporando la creatividad de una forma natural".
Gijón Impulsa es consciente de esa necesidad y por eso desde el pasado día 1 de febrero se ha puesto en marcha el programa "Residencia LABoral Impulsa", de estancia y apoyo a emprendedores y microempresas del sector cultural y creativo con el que se busca reforzar la actividad y los servicios que se pueden prestar a estas empresas emergentes.
Ya se han seleccionado cinco proyectos para la presente edición de esta residencia, que ofrece a los emprendedores del sector creativo espacio e infraestructuras de trabajo, acompañamiento de profesionales, orientación hacia el negocio y apoyo en la búsqueda de socios, subvenciones y ayudas. Además, se les facilitarán los apoyos en la búsqueda de socios, subvenciones y ayudas, así como conexiones relevantes en la red local, nacional e internacional que ayuden a paliar la falta de mercado.
La estancia será como máximo de 18 meses de duración, de la que ya disfrutan cinco proyectos de factura diversa.
