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ÁNGEL M. MARTÍNEZ MARTÍN | Jefe de servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Universitario de Cabueñes

"Con la prevención del cáncer de cuello de útero debemos llegar a más mujeres y ser más eficaces"

"Lo de la consulta anual al ginecólogo es un concepto erróneo; fue el único modo que hubo en los 80 para que se hicieran citologías"

Ángel Martínez, en la escalera del centro sanitario gijonés. JUAN PLAZA

Ángel Martínez Martín lleva menos de un año al frente del servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital de Cabueñes, que dejó vacante por jubilación José Solís. Nacido en Madrid, criado en Valencia y con 26 años de ejercicio en la especialidad -todos ellos en Valladolid, en el Hospital Río Ortega-, puso rumbo a Gijón el pasado mes de agosto, cuando se hizo con la plaza de jefe y con ello, además de promocionar profesionalmente, cumplió la inquietud que le rondaba de vivir con su familia en el norte de España. Casado con una enfermera, ya avisa de que en sus planes de futuro está establecer una comunicación directa con Atención Primaria para lanzar más trabajo conjunto. Es sólo una de las muchas ideas que empieza a poner en práctica.

- Describa el servicio de Ginecología de Cabueñes.

-Somos 21 ginecólogos y siete médicos internos residentes, lo que nos sitúa en una dimensión mediana-grande dentro de la ginecología española. La edad media del personal es alta, de unos 58 años, así que yo, con 51 años, soy de los jóvenes. Eso nos pone en un horizonte de muchas jubilaciones. Este servicio tiene una trayectoria muy completa y he podido ver que se han estado haciendo muy bien las cosas. Pese a eso, también creo que tenemos unas posibilidades de mejora infinitas, y el hecho de que yo venga de fuera de la región creo que puede aportar una visión nueva.

- Es la suya una especialidad con mucho campo...

-Sí, es una doble especialidad. La obstetricia se ocupa de todos los aspectos del embarazo, parto y puerperio, tanto a nivel fisiológico como patológico, y eso incluye también el diagnóstico prenatal, la ecografía obstétrica y una parte nueva que se está desarrollando mucho en los últimos años que es la medicina fetal. El feto ya no es algo que solo observamos, sino en los que podemos intervenir. El diagnóstico prenatal es uno de las partes potentes del servicio, en buena medida porque tenemos un gran equipo de ecografistas.

- Obstetricia, por un lado, y por otro, la ginecología.

-Sí. Con muchísimas consultas y algunos temas que están teniendo bastante peso. Por ejemplo, en estos momentos hay una gran presión relacionada con la patología del suelo pélvico. Porque tenemos una población mayor, que ya no oculta problemas como la incontinencia o los prolapsos (la caída del órgano) y quieren una solución. También está la parte oncológica, tremendamente importante, y dentro de ella hay un aspecto que me llamó la atención cuando llegué aquí: el diagnóstico precoz del cáncer de cuello de útero. Creo que obligatoriamente debemos llegar a más mujeres y ser más eficaces. Se hacen pocas citologías.

- ¿Qué le preocupa?

-Que ese diagnóstico precoz se hace solo a nivel de atención especializada, y ahí perdemos posibilidades de buscar patología entre la población a priori sana, que debería participar en el cribado de cáncer de cuello de útero basado en las citologías. Por eso creo que ahí puede y debe integrarse la Primaria. Eso nos permitiría llegar a más mujeres y tener mejores índices de diagnóstico precoz. Estamos lejos de tener unos objetivos razonables. Tenemos que llegar a más pacientes.

- ¿Es un cáncer muy letal?

-No se trata tanto de eso como de aprovecharse del hecho de que el cáncer de cuello es el único de nuestra especialidad que podemos prevenir y tratar precozmente. Por desgracia, los de útero, ovario, vulva o vagina están lejos de nuestro alcance en cuanto a prevención. Cuando los ves son hallazgos casuales, muchos ni dan síntomas, y cuando los diagnosticamos suelen ser avanzados.

- ¿Qué quieren hacer con la patología de suelo pélvico?

-Ya hay una unidad específica y pensamos en implementar alguna cosa más: fisioterapia, rehabilitación, más espacio de consultas y algún quirófano más. La rehabilitación de suelo pélvico muchas veces no soluciona el problema, pero ayuda a enfrentarlo mejor hasta para las mujeres que van a pasar por quirófano, para una recuperación mejor.

- La natalidad está en horas bajas. ¿Cómo lo ve?

-Como en toda Asturias, en Cabueñes la bajada de nacimientos ha ido en picado en diez años. Ahora estamos en torno a 1.500 partos anuales, cuando sé que hubo un pico máximo de 2.700 hace años. Es una cifra que da un poco de pena para una población de referencia como ésta.

- Eso no implica que no afronten novedades en esa área.

-El objetivo principal de un servicio como el nuestro debe estar precisamente en la obstetricia. Es la única parte del servicio que no cierra nunca, y para ella también nos planteamos cosas, como inaugurar en breve la unidad de fisiopatología fetal.

- ¿De qué se ocupa?

-Al final del embarazo hay patologías especiales que nos obligan a un seguimiento mayor: fundamentalmente patología hipertensiva, retrasos de crecimiento intrauterino, control un poco más estricto de los embarazos gemelares... y la atención de toda la patología materna que surge en el último trimestre del embarazo.

- En los últimos meses se ha trabajado para sacar el embarazo de bajo riesgo del hospital. ¿Debe ser así?

-La mujer embarazada es una mujer sana, pero que está viviendo un fenómeno fisiológico muy peculiar con fácil desviación hacia lo patológico, aunque casi siempre sale todo bien. Así que en circunstancias normales lo bueno es que sea atendida en Atención Primaria, siempre con nuestro apoyo desde el servicio hospitalario. Pero lo lógico es que nosotros nos dediquemos a la embarazada que nos necesita.

- Que por la edad a la que ahora se embarazan las mujeres serán cada vez más. ¿O no?

-La edad, por sí sola, no es un factor definitorio de embarazo de riesgo. Pero complica. Una mujer con 48 años puede estar en una edad social muy joven, pero biológicamente las cosas no son así.

- Su consejo es...

-Que no nos olvidemos de la biología. Socialmente podemos sentirnos y vernos muy jóvenes, pero la biología manda. Y hay una edad óptima para un primer embarazo y ésa está por debajo de los 30 años. En Cabueñes la edad media para el primer embarazo está en 34 años, o algo más.

- Pero con la tecnología, las nuevas técnicas, los mayores controles... las complicaciones del embarazo no son tantas como podrían pensarse.

-Porque vivimos en una sociedad muy sana. La más sana de la historia. Pero son embarazos que nos llevan mucho tiempo. Y cuando nos encontramos con patologías severas en esas madres mayores, son peores. Otra cuestión que no se debe menospreciar es la del momento del parto. Yo siempre digo que un parto es como correr una maratón. Y no es lo mismo afrontar ese esfuerzo con 20 años que con 46 años. El cuerpo no te responde igual.

- La estrategia nacional del parto más humanizado supongo que le gusta.

-Yo concibo mi trabajo supeditado a una condición absoluta: la seguridad. El protagonista del parto es el bebé y el objetivo de la atención obstétrica es tener niños sanos y madres sanas. Partiendo de eso, todo lo que se puede hacer es añadir confort.

- Cabueñes tiene buenos indicadores por pocas cesáreas

-Buenísimos. Y muy buenos indicadores que denotan pocos problemas tanto para los niños como las madres. Es síntoma de que se hace muy buena obstetricia.

- Sí tienen datos algo más altos de partos instrumentales.

-Eso es porque tenemos mucha epidural y madres mayores, y de alguna forma hay que ayudarlas. Pero son partos instrumentales de muy baja intervención.

- ¿Le ha dado tiempo a percibir si las mujeres de Gijón se cuidan ginecológicamente hablando más o menos que otras?

-Creo que las mujeres de Gijón se cuidan algunas, y otras nada. Por desgracia, llegamos a muy pocas con citologías.

- ¿Hay que cumplir con la revisión anual al ginecólogo?

-Es un concepto erróneo. Fue el único modo que había en los años 70-80 para que las mujeres fueran al ginecólogo a hacerse citologías. Pero ¿por qué no nos hacemos una revisión neumológica todos los años o una neurológica? No hay nada especial en la ginecología, más allá de la citología, que sirva para mejorar la calidad y cantidad de vida de las mujeres. Sólo el cáncer de cuello de útero se puede detectar precozmente y sobre eso hay que trabajar.

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