Los peritos están de fiesta. El Colegio Oficial de Graduados en Ingeniería de la rama industrial e Ingenieros Técnicos Industriales del Principado celebró ayer su reunión anual para reivindicar la profesión y para repartir honores entre sus socios, nombrando este año además a la alcaldesa, Carmen Moriyón, como colegiada de honor. En su discurso de agradecimiento, Moriyón anunció que el Ayuntamiento respaldará la implantación en Gijón de un nuevo grado en el campus gijonés, el de Ciencias e Ingeniería de Datos. "Esperemos que no sea una batalla tan larga como la desarrollada en torno al grado de Organización Industrial", culminó la alcaldes.

Dentro de los agasajos, Delfín Luis García Novo y José Díez Reguero recibieron las distinciones como socios de mérito, mientras que el nonagenario Eliseo Mateos Melón festejó sus bodas de platino con la profesión. Mateos, gijonés de 1921, es el único titulado que llega este año a los 75 de andadura profesional. En 1942 comenzó a ejercer como ingeniero en la antigua ERCOA.

Junto al veterano perito recibieron distinciones 57 colegiados que cumplieron sus bodas de oro y 65 que han llegado a las bodas de plata en la ingenería técnica industrial.