El servicio de seguridad del Jardín Botánico de Gijón volvió a ser, ayer, motivo de debate entre los consejeros de la empresa municipal Divertia. Esta vez por partida doble. Por un lado, se dio luz verde a la adjudicación del nuevo servicio a la firma DN24 2000 SL, la única que se presentó a la licitación. El precio ofertado fue de 303.970,83 euros, a los que hay que añadir 63.833,88 en concepto de IVA. Y, por otro lado, con la presentación al consejo de un informe técnico donde se evalúan las posibles sanciones a imponer a la actual concesionaria, la firma Baster Seguridad, por los incumplimientos de las condiciones del contrato. En su momento, los grupos municipales de la oposición exigieron que ese contrato fuera resuelto de inmediato.

No fue la opción de Divertia, la entidad que preside el concejal forista Jesús Martínez Salvador. Los juristas municipales no encontraron motivos suficientes para plantear esa rescisión y sí posibles costes para las arcas municipales de llevarse a cabo esa ruptura contractual y acabar el asunto en los tribunales. También se tuvo en cuenta el poco tiempo que quedaba de contrato. De hecho, la decisión final fue agilizar al máximo la licitación para no demorarse en el cambio de empresa.

Pero que no hubiera argumentos para la rescisión no significa que no se hayan detectados incidencias que puedan ser sancionables. Y por esa vía van los movimientos que ahora pone en marcha Divertia. El informe elaborado detecta cuatro faltas muy graves, que se penalizarían cada una con hasta 3.000 euros, y otra falta grave que computa por mil euros.

Otros dos asuntos pasaron por el consejo de administración de Divertia. Uno, la derogación de poderes y otorgamiento de otros nuevos para cumplir con la entrada en vigor de la nueva Ley de Contratos del Sector Público. Otro, el pago a los directivos de la época de la paga extra que se les quitó en 2012. Este pago afecta a Luis Abel Saiz y Teresa Sánchez y a quienes antes eran gerente del Jardín Botánico y la Sociedad de Turismo, Jesús Martínez Salvador y Ana Braña, que ahora son concejal de Deportes y concejala de Hacienda en el gobierno de Foro. Estos dos últimos renunciaron a ese ingreso. Esas pagas van de los 2.800 a los 3.600 euros. Quien ya la había reclamado y cobrado era Ignacio Carballo, antiguo director del Festival de Cine.