Los vecinos del barrio gijonés de Pumarín vivieron el pasado lunes una tarde un tanto agitada. Los propietarios de una cafetería de la zona advirtieron la presencia de unas avispas en el interior de su establecimiento, insectos que una y otra vez chocaban contra las ventanas de forma inusual y rápidamente requirieron la presencia de los bomberos de Gijón.

"Eran enormes, de color negro y con las patas amarillas", relata una vecina afectada por lo que resultaron ser avispas asiáticas. La primera acción de los bomberos fue la de cerciorarse de la no presencia de un nido de estos insectos. Después procedieron a desinfectar con un spray especial toda la zona, rociando la puerta del establecimiento para que así no pudieran volver a entrar. "Parecían estar locas, se tiraban contra las ventanas", explica otro vecino de la cafetería. "Eran muy agresivas, las había de dos tipos, las más pequeñas eran muy rápidas", añade. Los bomberos aconsejaron a todos los vecinos que comprasen un spray y rociaran sus puertas y ventanas para prevenirse de nuevas apariciones de esta avispa asiática que en Galicia ya ha causado la muerte de tres personas.