Acaba de presentar un libro en La Buena Letra titulado "Cosecha en febrero". Es una mujer culta, cordial y comunicativa.
- Defínase, por favor.
-Nací en Teruel (1947), tengo tres hermanos, dos del primer matrimonio de mi padre, y dos del segundo, yo soy la última. Estoy casada con Julio Castaño García y tengo dos hijos, ambos son médicos, el chico es Traumatólogo y la chica es ginecólogo. Mi madre se murió cuando yo tenía cuatro años y me crié con una tía a la que siempre llamé mamá.
- ¿Cómo vino a parar a Gijón?
-Porque me casé con un asturiano.
- ¿Cómo fue su formación?
-Hice el Bachiller en Teruel y como allí no había Universidad, todos teníamos que ir a Valencia o a Zaragoza. Yo fui a Valencia, donde estudié Historia, especializándome en Historia Contemporánea. Estuve dos años en Valencia dando clases en un instituto y después me fui a Barcelona porque estaban allí mis hermanos, y conocí a Julio. Nos vinimos a Gijón y estuve trabajando en el colegio Atalía durante treinta años. En la segunda etapa, dábamos las clases los licenciados.
- ¿Su libro es su ópera prima?
-Sí, es el primero que edito, pero tengo muchas cosas escritas, relatos breves que ocurrieron en Atalía. De cosas simpáticas de los alumnos, chistes.
- ¿Por qué escribe?
-Tuve un profesor de Literatura que siempre me decía que tenía que escribir, que estaba dotada para ello, y un día me decidí.
- ¿Qué significa el título, "Cosecha en febrero"?
-Es tan rara la historia que dice uno de los protagonistas, "es tan extraño como una cosecha en febrero", me gustó, y lo titulé así.
- ¿De qué trata su contenido?
-Hay un asesinato, pero no es una novela negra al uso. Ocurre en un pueblo pequeño de Teruel, todos los vecinos se conocen, nunca pasa nada, y un día aparece el cadáver de un ministro. Sólo dos vecinos saben lo que realmente ocurrió, y al final se conoce la solución en el epilogo. Es una novela con un lenguaje muy sencillo, no hay temas filosóficos, ni nada de metafísica. Nunca me gustaron las novelas negras truculentas, las prefiero tranquilas, como las del estilo de Patricia Highsmit.
- ¿En qué se inspiró?
-En los agobios de la gente, porque pienso que hasta un hombre honrado puede convertirse en asesino si piensa que alguien está a punto de destrozar su vida.
- ¿Qué personaje contemporáneo le provoca más admiración?
-No lo sé, tal vez Winston Churchill o Kennedy.
- ¿Qué le carga de energía?
-Pensar en algo conocido, en algo que me gusta. En una persona que conozco.
- ¿Se han cumplido sus sueños con este libro?
-Sí, hacía tiempo que lo deseaba.
- ¿De qué se siente orgullosa?
-De mis hijos. Y de mi marido, que es una buena persona y pienso que he tenido mucha suerte con él.
- ¿Y de qué se siente menos orgullosa, respecto a su carácter?
-A veces me preocupo demasiado, doy muchas vueltas a las cosas y preferiría ser un poco más viva la vida.
- ¿Le gusta Gijón?
-Sí, es una ciudad muy cómoda y la gente es encantadora.
- ¿Dónde vive?
-En la urbanización del Rinconín.
- ¿Qué talento añadiría a su personalidad?
-Algo relacionado con la música. Mi marido toca muy bien la guitarra. Yo canté en el coro de la facultad.
- ¿Qué opina de la historia contemporánea?
-Que está hecha un lío, me preocupa mucho.
- ¿A quién expulsaría de esta sociedad?
-A los terroristas. No tienen ningún derecho a matar a la gente, gente inocente que no les han hecho nada.
- ¿Con qué se siente más indulgente?
-Con aquellas personas que tienen pocos recursos para enfrentarse a la vida. Me gustaría ayudarla.
- ¿Su marido sigue pintando?
-Sí. Él es químico, pero en Barcelona hizo Bellas Artes. Cuando vinimos a Gijón se dedicó a hacer grabado.
- ¿En qué pierde el tiempo?
-Me gusta mucho la lectura.
- ¿Y cuál su autor preferido?
-Últimamente he leído a Pérez Reverte, me parece muy interesante y ameno.
