Janet de la Rosa, residente en Moreda (Aller), no quería llevarse ayer a Gijón a su pequeña perra Pícara, pero su hijo se lo pidió y al final accedió. Los peores presagios de De la Rosa se cumplieron y en un pequeño descuido la perra desapareció. "Nunca marcha de mi lado", se lamenta Janet, que pide ayuda para encontrar a Pícara.

La mujer ha denunciado a la Policía la desaparición del can, que lleva un collar dorado con cristales de Swarovski. "Ye un caramelín", dice Janet de la Rosa de su pequeña Pícara. Una perdida que le ha afectado especialmente después de la muerte a principios de año de otro perro de su propiedad.

La perra tiene chip y Janet de la Rosa teme que o bien se la robaran o bien se perdiera entre tanta gente en un día en el que se concentra tanta gente en Gijón.