La operación de la Guardia Civil desarrollada en la madrugada de ayer en Gijón y Villaviciosa ya está en conocimiento del Juzgado de Instrucción que lleva la causa del asalto a Sidra Menéndez. Las enormes similitudes en las formas de acceder a las viviendas afectadas, cómo revolvieron todas las pertenencias de los dueños y las amenazas de muerte proferidas a los moradores para lograr que les llevasen a la caja fuerte son evidentes. La Guardia Civil, sin embargo, afirma que no barajan que sean ataques sólo dirigidos a lagareros.

Los dos detenidos son originarios de países de Europa del Este, pertenecen al mismo grupo criminal itinerante que cuenta con un amplio historial delictivo por otras zonas de España. De hecho, uno de los arrestados el jueves perpetró un asalto similar en Vega de Poja, cerca de Pola de Siero, hace tres años junto a otros miembros de la banda, que acabó siendo detenida en Castellón. Ahora está previsto que pasen a disposición judicial mañana sábado, mientras la Benemérita les toma declaración y ultima las diligencias pertinentes. Al tiempo, se mantiene abierta la investigación para intentar atrapar al resto de sujetos que huyeron al llegar a Gijón tras cometer los robos. Al menos son tres personas más las que participaron en la madrugada de ayer en los cuatro incidentes en Villaviciosa y que viajaban en el mismo vehículo.

Los cinco ladrones huyeron en la furgoneta sustraída en Sidra Buznego y al saber que les estaban siguiendo optaron por apearse a la entrada de Gijón, donde una zona de arbustos próxima a la avenida de El Llano. Unos corrieron hacia la zona de Viesques y otros por la senda de La Camocha para dividir a sus persecutores. Tres de ellos lograron escapar y los dos detenidos tienen numerosos rasguños su huida entre la maleza. La Guardia Civil estuvo rastreando la zona muchas horas, por si se habían escondido entre los matorrales. Usando incluso a los perros de búsqueda de la Guardia Civil.

En la Comandancia de Gijón está también la furgoneta sustraída en Sidra Buznego y que dejaron tirada en medio de la carretera para huir. Una de las incógnitas es dónde estaría el coche que la banda utilizó para llegar a la Mariña. En el furgón de Buznego los agentes lograron recuperar varios de los objetos robados en su periplo nocturno delictivo y ahora busca pistas y huellas que ayuden a avanzar en la investigación para así atrapar al resto de la banda.