Con toda Asturias de fiesta patronal el Real Grupo de Cultura Covadonga no iba a ser menos. Así que ayer, en su día grande, fueron homenajeados casi un centenar de deportistas que a lo largo del año 2017 fueron campeones de España o internacionales con la selección española en su disciplina. También una decena de empleados que cumplen los 25 años de servicio al club recibieron una condecoración. El momento más emotivo de la mañana se produjo cuando se subieron al escenario central los dos homenajeados por su trayectoria. El gijonés Agustín Antuña, recibió el aplauso del millar de asistentes y recogió emocionado la insignia que le distingue como Grupista Ejemplar 2018. "Es la mayor recompensa que me pueden dar por todos estos años. Hay gente que lo merece más que yo, estoy muy agradecido", resumía el veterano deportista.

Antuña fue deportista en el Grupo, donde ingresó "de los primeros", también pasó por varias juntas directivas, fue entrenador y delegado de diversas secciones, incluso escribió varios libros sobre el Grupo. "Cuando yo entré por primera vez en la directiva, en 1967, éramos 896 socios, si me dicen que íbamos a llegar a 40.000 no lo creo", explica el galardonado. "Lo que yo quiero es que no se pierda el espíritu del Grupo, que los más pequeños vengan, que respiren deporte", continúa Antuña quien en 2019 cumplirá 80 años y quiere "seguir viniendo durante muchos más".

No solo Agustín Antuña subió al escenario principal para recoger un premio por su paso por el Grupo. El otro de los homenajeados fue José Iván Díez Cortina y lo hizo por su trayectoria deportiva. El pasado lunes el veterano gimnasta sufrió un ataque al corazón y ayer llegó al Grupo dando las gracias por haber recibido el alta, "la mayor alegría que me han dado es poder venir hoy después de lo que me pasó hace unos días, estoy muy emocionado por las muestras de cariño que he recibido".

José Iván Díez, fue deportista que promocionó su práctica favorita, la gimnasia artística dentro del Grupo. "Cuando comenzamos con el Grupo 2000 nos dimos cuenta de que necesitábamos un gimnasio nuevo, venía cada vez más gente y logramos poner en marcha un deporte que a mí me ha dado muchas alegrías", cuenta el veterano socio. "Tuve una corta vida como deportista y me volqué en la docencia. Me llamaron de la Real Federación Española de Gimnasia y estando en el Grupo pude cumplir objetivos que a cualquier persona que ama un deporte le hubiese gustado cumplir", continuaba Díez, socio con el número 485 del Grupo Covadonga.

La directiva grupista cree que tanto Antuña como Díez encarnan los valores que debe poseer un socio de la entidad.

Por su parte el Club Natación Santa Olaya celebró también su día grande que comenzó con el XXIX Cross Subida a la Campa Torres y finalizó entrada la tarde en el Prau de la Piedra con juegos e hinchables para los más pequeños. El presidente del CNSO, Secundino González, se congratuló por la presencia de cientos de socios en unas fiestas "que son para todos". Durante el día la comida de hermandad y el posterior baile de sobremesa sirvieron para unir lazos entre los socios del Santa Olaya. "Todo ha salido a pedir de boca, cada vez se juntan más socios y es algo que a los que vivimos el día a día de la entidad nos alegra enormemente", explicó González. Las fiestas sociales del Real Grupo de Cultura Covadonga se cerrarán durante el día de hoy en otra jornada intensa.