"Bienvenidos a mi hotel" ha arrancado esta semana en la sobremesa de Cuatro con participación asturiana. Álex y Álvaro, dos jóvenes gijoneses que regentan un hostel en Gijón, competirán durante esta semana en el nuevo formato de Mediaset.

La mecánica del programa es muy similar a la de "Ven a cenar conmigo" pero se participa en parejas. Cada semana, cuatro parejas se alojan en los establecimientos de sus competidores para valorar diferentes aspectos como el trato, el estado de las instalaciones, la limpieza o la comida. Al final de la semana se conocerá al ganador.

Tras un primer programa en Vigo, los asturianos fueron los segundos concursantes en presentar su establecimiento. En este caso, un hostel de inspiración surfera cerca de la playa de San Lorenzo. Álex y Álvaro, amigos, vecinos y propietarios del Gijón Surf Hostel.

Tal y cómo contaron en en su vídeo de presentación, estos dos enamorados del mar y de la aventura decidieron durante un viaje a Costa Rica crear un lugar para amantes del surf en su ciudad natal. “Nuestro negocio nace como un ideal de vida, querer vivir en la ola", aseguró Álvaro.

Tras recibir a sus contrincantes con un culín de sidra, los gijoneses les explicaron que, lejos de las cómodidades clásicas de los hoteles tradicionales, tendrían que compartir habitación, baño y dormir en literas. Aspectos que no fueron bien recibidos por todos los participantes. Quitarse los zapatos al entrar en el hostel fue otro de los momentos incómodos para algunos de los concursantes, que no acababan de adaptarse al estilo del establecimiento.

La gastronomía asturiana, plato fuerte en Bienvenidos a mi hotel

Tras una comida muy asturiana, al aire libre, en la que el el pitu de caleya fue el plato estrella, los gijoneses llevaron a sus contrincantes a practicar surf, uno de los momentos que más halagos consiguió de sus competidores. El desayuno fue otro de los momentos que hicieron ganar puntos a los asturianos. Puede que por eso, este fuera el momento elegido por varios comensales para sembrar la duda sobre sobre los precios presentados al programa por los gijoneses (49.95 euros por pareja con desayuno incuido).

En las valoraciones finales, varios de sus competidores fueron más duros de lo esperado y no dudaron en penalizarles, sobre todo por tener que compartir habitaciones y baños. La comida y las actividades fueron sus puntos fuertes en la votación, con un resultado más ajustado al buen ambiente que se respiró durante la estancia de los concursantes en Gijón. Al final de la semana se sabrá cuál es la pareja ganadora de los 3.000 euros.