Inversor, social, cumplidor con la ley de Estabilidad Presupuestaria y ajustado a los límites impuestos por el Plan Económico-Financiero. Así presentó ayer la edil de Hacienda, Ana Braña, el proyecto presupuestario del actual equipo de gobierno para un 2019 electoral. Un proyecto que se traduce en 226.159.900 euros en el presupuesto municipal para elevarse a 308.569.008 euros en el consolidado que agrupa a todas las entidades del sector público. Son cifras más que similares -los descensos son del 0,54 y 0,72% , respectivamente- a las del presupuesto de partida de 2017: el último aprobado en Gijón.

Ahora toca convencer a la oposición de las bondades de este presupuesto para evitar un segundo año consecutivo de prórroga. No parece fácil viendo el rechazo de todos a los presupuestos sectoriales ya votados y el horizonte de unas elecciones. "Nosotros no damos este presupuesto por muerto. Aquí hay mucho trabajo, más que otros años si cabe porque hubo que hilar muy fino con el Plan Económico. Y no se trata de un documento de laboratorio político sino de servicio público. Queremos que salga adelante porque creemos de verdad que la ciudad necesita un presupuesto. Las prórrogas siempre perjudican y ralentizan los tiempos", explicó Braña.

A la hora de defender el carácter inversor de la propuesta económica Foro reivindica la cifra de 30,8 millones del presupuesto consolidado donde destacan los 9,6 millones de inversiones de la Empresa Municipal de Aguas a los que añadir otros 3,5 en Emulsa y 1,5 en Emtusa. El capítulo de inversiones reales del Ayuntamiento es de 9,5 millones y aunque nuevas son las partidas fijadas bajo ese epígrafe no hay novedad en las propuestas entre las que destacan 3,8 millones para la Comisaría de Policía Local, 500.000 euros para le campo de fútbol de uso preferentemente femenino. 785.000 euros para la escuela infantil de Contrueces, 450.000 para un vehículo para los bomberos, 490.000 euros para expropiaciones (incluida Tabacalera) 350.000 euros en renovación de juegos para parques y 1,2 millones para obras en vías públicas como Manuel Llaneza, Pablo Iglesias, Juan Alvargonzález, Anselmo Solar o la plaza del 6 de Agosto.

En transferencias de capital -donde van las subvenciones a fachadas y barrios degradados- hay una partida de algo más de 6,1 millones para poder licitar nuevas fases de las barrios degradados de Inuesa, la Sindical de Contrueces, Portuarios y Monte Areo en Monteana. Sumadas inversiones reales y transferencias de capital el movimiento inversor municipal que aparece negro sobre blanco en el presupuesto alcanza los 15,7 millones: 4,3 millones menos que en 2017. Eso sí, Braña quiso dejar claro que lo que se podrá gastar el año que viene en estos capítulos se elevará a 24,1 millones al incorporar remanentes de inversiones en curso que ya venían fijados en el Plan Económico-Finaciero. Uno de esos elementos de hilado fino que Braña reivindicó.

Bajo el epígrafe de activos financieros computan 4,8 millones. Hay 1,4 millones para que el Ayuntamiento cumpla con su parte del nuevo convenio del plan de vías -que alcanza los 90 millones en el total hasta el año 2034- y 1,8 para la Zalia. El fondo de contingencia tiene una reserva de un millón de euros.

Una de las partidas que más crece, un 4,05%, es la de gastos de personal que se eleva a 60,6 millones para poder cumplir con todos los incrementos por acuerdos locales y aplicación de la ley estatal. Son 2,3 millones más a pagar en el presupuesto municipal que se eleva a 4,9 millones en el consolidado. Braña reivindicó la contención en los gastos corrientes que suben un 0,53% sumando 38,1 millones. Las transferencias corrientes suman 84,7 millones.

El grueso son los dineros que el Ayuntamiento aporta a sus entidades y que, en el caso de Servicios Sociales crece en dos millones sobre la primera cifra presupuestada en 2017 de 12,9 millones. Un 16% más. Emvisa crece un 10% que son 102.000 euros sobre 5,1 millones. Es aquí donde Braña fijó el compromiso soical. La única aportación que bajaes la de Divertia porque el Ayuntamiento asume parte de las subvenciones que ahora daba la empresa de festejos. Los convenios nominativos con entidades de la ciudad se mantienen.