La valenciana Beatriz López no olvidará jamás su escapada a Gijón de este puente. Su perro "Romeo", un pequeño setter blanco, desapareció en la playa de San Lorenzo por la mañana. Apareció ayer a mediodía, "agotado" pero en perfectas condiciones, después de que los vecinos de la ciudad hiciesen viral el caso en redes sociales. "No sé cómo agradecer a la ciudad de Gijón su ayuda. Me han dado una lección de voluntad y civismo", reconoce la mujer.

La joven de 26 años no conoce la ciudad, así que cuando vio que su Romeo no aparecía no supo a quién acudir. "Llamé a la policía, al lacero y a varias protectoras, pero los que más se volcaron fueron los vecinos en redes sociales", asegura. El mismo viernes se hizo un perfil de Facebook para poder compartir una fotografía del animal y, en cuestión de horas, los grupos en redes de vecinos y amantes de los animales reprodujeron sin parar el retrato de Romeo, por lo que la información sobre su paradero se iba actualizando a tiempo real. El sábado varios usuarios alertaron de que Romeo deambulaba por La Camocha y, el domingo, por Caldones. No apareció, no obstante, hasta que López se puso a gritar ayer su nombre por el barrio minero. "Como no conocía a los que le intentaban coger se escapaba. Yo creo que o me escuchó o siguió mi rastro porque vino directamente hacia mí", asegura. "Me llamaron muchas personas avisándome de dónde estaba Romeo y mi gratitud es infinita. Espero que Gijón siga siempre así de concienciada", sentencia la joven, que ayer por fin pudo regresar a su Valencia natal acompañada de su mascota: "Es mi familia"