El joven 20 años de edad, vecino de Gijón, al que se le atribuyen los asaltas de varias joyerías de La Calzada, ha vuelto a ser detenido por la Policía Nacional, esta vez por robar el dinero de una gasolinera tras amenazar con un destornillador a la empleada. Un día antes había actuado en un supermercado del barrio de El Coto y se había llevado la recaudación de una de las cajas.
El nuevo hecho delictivo protagonizado por este joven, que responde a las iniciales L. F. J., sucedió el día 17 de febrero a las 21.15 horas. Fue entonces cuando un hombre entró en la oficina de una estación de servicio del barrio de Tremañes y amenazó con un destornillador a la empleada para sustraer el dinero de la caja. Actuó con mucha rapidez huyendo a continuación a la carrera tras conseguir su objetivo.
Los investigadores, con la descripción aportada por la víctima y con las imágenes captadas por el circuito de videograbación, pudieron identificar sin ningún género de dudas a L. F. J. como presunto autor de un nuevo hecho delictivo violento. Esta persona ya había sido detenida en los últimos meses como autor material del robo en dos joyerías del barrio de La Calzada, en concreto Muiña, en la avenida de La Argentina, y Muñiz, en la calle Brasil. que habían suscitado inquietud e inseguridad entre los comerciantes y vecinos de la zona oeste de la ciudad. Desde el momento de su identificación se estableció un amplio dispositivo policial para su detención que se produjo en la tarde del lunes 25 de febrero en las inmediaciones de una casa ocupada del barrio de Tremañes en la que se ocultaba, consciente de su interés policial.
Ingreso en el Centro Penitenciario de Asturias
Ingreso en el Centro Penitenciario de AsturiasEl arrestado, L. F. J. de 20 años de edad, con antecedentes por delitos violentos pasó ayer a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Gijón, cuyo titular decretó el ingreso en prisión provisional en el Centro Penitenciario de Asturias.
Los agentes también le consideran autor del robo cometido el día 16 de febrero en un supermercado del barrio de El Coto al que había entrado como cliente para comprar una lata de cerveza y se había apoderado de más 600 euros. En esta ocasión había cometido el robo en compañía de un amigo, con el que se había repartido la cantidad sustraída.
Este acompañante, vecino de Oviedo, fue detenido y se comprobó que ya había colaborado con L. F. J. en robos anteriores, siendo el encargado de ocultar las joyas y venderlas para obtener un beneficio económico.
