Desde un Opel Kapitän hasta un autobús londinense pasando por camiones antiguos de todo tipo. La Asociación de Amigos Asturianos de Vehículos Clásicos, constituida oficialmente hace tres años, aprovechó la soleada jornada del sábado para compartir con los gijoneses varias de sus piezas míticas. "Esta concentración no tiene más connotaciones que enseñarlos y compartirlos con la sociedad", explicó Alberto Puerta, presidente de esta entidad que cuenta con alrededor de cincuenta piezas clásicas entre camiones y autobuses.
La comitiva estuvo compuesta por nueve vehículos entre camiones, autobuses y coches, que estuvieron expuestos en varias zonas de Gijón. La primera parada tuvo lugar por la mañana en la plaza del Marqués. Allí, decenas de curiosos no dudaron en subirse y fotografiar los aparatos. Uno de los que más éxito tuvo fue un Routemaster -el autobús de dos plantas y color rojo típico de Londres- construido en 1962 y que dio servicio diario hasta 1981. "Al dueño le han ofrecido dinero por él, pero este tipo de vehículos tienen un valor sentimental que nadie quiere venderlos", aseguró Alberto Puerta. Algunos de los allí expuestos, de hecho, podrían llegar a valer entre 40.000 y 50.000 euros.
Otra de las piezas significativas que ayer recorrieron Gijón -el convoy fue hasta la Universidad Laboral y luego hasta Veranes- fue el autobús Pegaso 6035-A que la empresa municipal de Emtusa adquirió en 1979 y que restauró recientemente. "Fue una restauración muy lograda y agradecemos que hayan querido participar en esta muestra", relató Alberto Puerta.
Todos los vehículos exhibidos ayer funcionan a la perfección y parecen recién estrenados. "Son camiones que están vivos, que pueden funcionar y hemos querido compartir una pequeña muestra", añadió Puerta sobre "una saga de camiones" que alcanza el medio centenar.
