La memoria económica que se presenta este año a examen de los socios del grupo Covadonga en la asamblea merece una más que contundente reprobación a la gestión de una junta directiva a la que, por cierto, hasta once miembros han ido abandonando. Un proyecto lastrado financieramente y decepcionante. El valor (pag. 506) de los terrenos y construcciones es de 28,2 millones de euros, muy lejos de 40,4 millones. Pero estas valoraciones contables vamos a considerarlas como filosóficas porque el Grupo en Las Mestas es invendible, ya que si se vendieran las instalaciones desaparecería el club como tal. Para entenderlo, no tienen valor. Actualmente el club tiene créditos por 5,8 millones de euros en la confianza de que los socios continúan pagando los recibos.

En los últimos días, de nuevo Antonio Corripio ha recibido reprimendas en las vías jurídica y administrativa. Respecto a la rescisión unilateral del empleo del director del coro, nuevo varapalo con un coste de varios miles de euros, a los que hay que añadir los habidos en tenis y piragüismo, además de los despidos en las oficinas. Y deberá afrontar la autorización para poder legalizar las pistas de tenis 8 y 9, y pagar la correspondiente multa de la Confederación Hidrográfica (pag. 537 de la censura de cuentas). También el pago de 248.000 euros del 21% IVA de la factura de compra de La Torriente. En el ejercicio, el club subió los salarios un 5%, apesar que el IPC anual fue del 1,2%. El Grupo posee una plantilla que supera las 300 personas, a las que hay que añadir a las de las empresas externas contratadas. El club ha pasado de tener este último año 74 empleados indefinidos a tiempo completo a 83.

Otro desequilibrio importantisimo (pag. 557 de la Memoria): la recaudación por las cuotas mensuales de los socios ya no cubre los sueldos y gastos de personal, las reparaciones y los suministros. Mucho cuidado con estas magnitudes porque el funcionamiento del club se deja al importe que se recaude por los cursillos, que desde la llegada de Corripio se ha incrementado en más de un 31%. Si el IPC ha sido del 1,2%, Corripio eleva los recibos mensuales un 4%. Y así año tras año desde su advenimiento, sangrando los bolsillos de los socios.