Si el cierre de centrales térmicas está pasando factura al Puerto de El Musel, la pujanza de este tipo de energía en el norte de África está suponiendo una nueva oportunidad para el puerto gijonés. Un grupo suizo está acopiando carbón ruso en la explanada trasera de Ebhisa para mezclar con material de escombreras de minas de Asturias y León y venderlo a centrales térmicas del norte de África. Natural Mining Resources comenzó a operar el pasado noviembre en el puerto gijonés y en sólo cinco meses va a superar las 300.000 toneladas de carbón descargado.
El negocio consiste en mezclar la rica antracita siberiana con el mineral obtenido de la criba de escombreras y venderlo a las térmicas norteafricanas que aceptan la calidad de la mezcla resultante, inferior al extraído directamente de las minas rusas. También se cribará el carbón importado, clasificándolo para darle distintos destinos, algo que ya realiza hace tiempo en El Musel la compañía norirlandesa Lissan Coal Company, si bien con hulla y para reexportar la mayor parte del carbón a las islas británicas con destino a consumo doméstico.
Las previsiones con las que llegó a El Musel Natural Mining Resources se están superando. El grupo suizo estimaba descargar este año al menos 200.000 toneladas de antracita en los muelles gijoneses en todo 2019 y esa cifra ya se va a superar este mes de abril. De mantenerse el ritmo actual, a final de año se rondarían las 800.000 toneladas de antracita rusa descargada en El Musel, a lo que abría que añadir la posterior reexportación de ese mineral mezclado con el carbón de escombreras. Aunque no se llegara a esta cifra, las expectativas son que se superen las 500.000 toneladas de descargas anuales.
Además de los acopios de carbón ruso en El Musel, el grupo suizo también ha comenzado a acarrear al puerto gijonés algunos cargamentos de carbón recuperado de escombreras asturianas, si bien aún a pequeña escala. Por el momento no se ha reexportado ninguna partida de carbón.
La antracita rusa se embarca en el puerto báltico de Ust-Luga y llega directamente a El Musel o previa escala del barco en algún otro puerto europeo para alijar parte del cargamento. Los primeros envíos fueron bodegas en barcos compartidos con otros clientes, pero a partir de enero ya comenzaron a llegar buques con el cargamento completo para Natural Mining Resources, por el muelle Ingeniero Olano.
Ahora la operativa ha aumentado de escala, con sendos cargamentos de más de 70.000 toneladas cada uno, que se están descargando en la terminal de graneles sólidos, Ebhisa y con los que se superarán las 300.000 toneladas citadas. Uno de esos cargamentos, transportado por el granelero "Tuerkis" se estaba descargando ayer y el barco que transporta el segundo, el "Welprofit" estaba ayer fondeado en aguas de El Musel, a la espera de atracar hoy en Ebhisa.
Las operaciones de Natural Minnig Resources en El Musel explican en buena medida por que en el primer trimestre del año se duplicaron los tráficos de carbón por los muelles comerciales de El Musel en los que se realiza este tráfico, que son el Olano y el Muelle Norte. El segundo de los factores de ese incremento son las descargas de coque para ArcelorMittal, procedente de Bremen (Alemania), tráfico este último que tiene los días contados dado que se están reconstruyendo las baterías de coque de Gijón.
El aumento del carbón descargado por los muelles comerciales en un 113,65% en el primer trimestre contrasta con la reducción de las descargas de carbón por la terminal de graneles sólidos Ebhisa en el mismo periodo. No obstante, estos datos no son significativos en el caso de Ebhisa, dado que por el porte de los barcos que recalan en su muelle, el Ingeniero León, que un buque entre el último día de un mes o el primero del siguiente puede variar sustancialmente la estadística.
Aunque el descenso más acusado en Ebhisa entre enero y marzo fue el del carbón siderúrgico, la actividad fabril de ArcelorMittal no se resintió. En el caso del carbón térmico, las importaciones varían en función de la climatología, dado que cuanta más lluvia, menos funcionan las térmicas. Aquí el cierre de centrales también tendrá repercusiones.
