El Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) ha desestimado el recurso presentado la pareja gijonesa condenada el pasado mes de junio a cinco años de cárcel -y otros tantos de libertad vigilada- por abusar sexualmente de sus sobrinos, de 4 y 9 años de edad, durante un año aprovechado que se quedaban su cargo mientras los padres de los menores trabajaban en el negocio familiar. Este nuevo fallo incide en la veracidad del relato de los pequeños, que supera "el análisis de verosimilitud" porque "sus declaraciones han sido coherentes, no incurren en contradicciones y tienen apoyo en corroboraciones periféricas que dotan su testimonio de credibilidad".
La mujer condenada -responde a las iniciales S. F. C., de 24 años y tía biológica de los menores- mantiene una relación sentimental con el otro procesado, M. A. D. N., de 32 años. Ambos se quedaban al cargo de los pequeños en casa de éstos todos los miércoles mientras sus padres trabajaban. Durante alrededor de un año, el condenado le decía a la niña, de 9 años, "vamos a jugar a un juego de mayores, pero no puedes decir nada; es un secreto entre tú y yo" mientras le realizaba tocamientos y a sí mismo.
La tía biológica, en cambio, se
acostaba desnuda a dormir la siesta con el niño, al que daba besos en la boca y le instaba a que le tocase sus partes íntimas, algo a lo que el menor, de 4 años, accedía "sin ser consciente de lo que le pasaba". Estos abusos provocaron daños importantes en el menores como aversión al trato con adultos varones o micción involuntaria en el caso de ella y una conducta sexualizada en el caso del niño. Por ello, los condenados deberán indemnizarles, a través de sus padres, con 10.000 euros para cada menor. La acusación particular estuvo ejercida por Alejandro Fernández, de Bango Abogados.
