La creciente empleabilidad de los estudios de Formación Profesional, que se refleja en el elevado volumen de ofertas de trabajo destinadas a las titulaciones de FP en comparación con las destinadas a universitarios ofrece un futuro más prometedor a los perfiles técnicos con formación práctica. Pero no solo arroja oportunidades para los graduados, sino también para los empleadores. Uno de los efectos principales de la presencia de titulados de Formación Profesional en las empresas asturianas es que las compañías que los contratan promueven más estabilidad en el empleo, mejores salarios, realizan una mayor inversión en formación y en innovación, y son más productivas y venden más. Así se desprende de un informe de Fundación SEPI y Fundación Bankia sobre el peso de la Formación Profesional en la industria española, así como la influencia de estos técnicos en los procesos productivos de las empresas que los incorporan a su plantilla.
El estudio desvela que las empresas que emplean técnicos en FP ofrecen un contrato fijo y a tiempo completo al 83,7% de su plantilla, frente al 78,6% de las compañías sin esos profesionales. Además, la última Memoria del Consejo de Asturias de la Formación Profesional destaca que el 31,50% del alumnado acababa trabajando en la misma empresa donde realizó el módulo de formación en centros de trabajo.
Añade el informe de la SEPI, en cuanto a los salarios, que el coste medio por empleado en estas empresas se situó en 44.500 euros frente a los 31.800 de salario medio de las compañías que no contratan técnicos en FP. Esas diferencias son sostenibles porque las compañías que cuentan con esos graduados tienen más volumen de venta (63,5 millones frente a 9,5), son más productivas (36,3 euros por empleado y hora trabajada frente a 24,2 que las que no tienen graduados en FP) y venden más al exterior (28,2% frente a 14,5%).
En Gijón, el auge de las enseñanzas de FP industrial llevó a que el pasado septiembre a que se inaugurasen los estudios de mecatrónica con la matrícula completa. Sus responsables explican que en los últimos años se encuentran "desbordados" por la gran demanda de "perfiles técnicos para la industria".
Y en la reciente feria de FP Dual celebrada en la ciudad, el director regional del ramo, Javier Cueli, resaltó que nuestro sistema de Formación Profesional "es bueno, aunque necesita una actualización para acompasar la formación en los centros con las demandas de las empresas, fundamentalmente como consecuencia de los cambios tecnológicos de los últimos 20 años". Para ello juzgó necesario incrementar el porcentaje de alumnado en la dual, que en el último programa fue de un 6 por ciento con respecto al alumnado que finaliza la FP.
La mayor apuesta por avanzar, formar y aprender que caracteriza a las empresas que incorporan titulados de Formación Profesional también aparece en el impulso a la innovación. El 30% realiza actividades de I+D e invierten en esta materia, frente a solo el 2,4% de las que no tienen empleados de FP. El estudio de la SEPI supone un paso más en el trabajo para promover y prestigiar estas enseñanzas, así como para fomentar la producción de datos que permitan tener una imagen real del peso y la relevancia de la Formación Profesional en nuestro país.
