La Unidad de Vigilancia Ambiental de la Policía Nacional supervisa desde el jueves las labores de las empresas encargadas de la obra de Viesques que provocaron un vertido al río Piles, en la zona de la senda fluvial. Ese control seguirá, explican fuentes municipales, hasta que estén disponibles los resultados de las muestras tomadas en el agua para determinar la causa del vertido, algo que la UTE de Sondeos del Miño S.L. y Elecnor niegan por completo.

Mientras el Ayuntamiento niega la actividad, asegurando que sólo están realizando "labores de limpieza", tanto la UTE como los vecinos de la zona aseguran que la actividad se ha reactivado. "A nosotros no nos llegaron a paralizar la obra; detectamos un problema por culpa del parón de las navidades y el tipo de roca que aparece en el lugar donde trabajamos, que motiva ese color en el agua", aseguran desde Sondeos del Miño S. L.. "Ahora ya todo está perfecto y seguimos trabajando", añade.

Medidas

MedidasEsta versión choca directamente con la ofrecida ayer por el Ayuntamiento, que garantiza la vigilancia sobre la obra y niega tajantemente la actividad. Ahora están a la espera de los resultados de las muestras tomadas en el agua, mientras que la Confederación Hidrográfica del Cantábrico estudia qué medidas tomar contra la empresa por este vertido al río Piles.