Las acusaciones en el procedimiento por el crimen de Paz Fernández Borrego, tal y como avanzó LA NUEVA ESPAÑA, solicitaron esta mañana la prórroga de prisión preventiva para Javier Ledo, el único procesado por la muerte violenta que sufrió la gijonesa en Navia en 2018. Tanto Fiscalía, como las dos acusaciones particulares -la de los hijos por un lado y la de la familia por otro- incidieron en la necesidad de que este hombre permanezca en la prisión de Mansilla de la Mulas hasta el juicio, que todavía espera fecha y será por la modalidad de tribunal del jurado.
Frente a la petición de prórroga de prisión sólo se manifestó, como cabía esperar, la defensa de Javier Ledo, que sigue manteniendo que la muerte de Paz Fernandez se produjo "de forma accidental" tras una discusión por dinero. Pedro Víctor Alvarez, letrado defensor, solicitará además en los próximos días que su cliente sea trasladado hasta el Centro Penitenciario de Asturias para poder preparar el juicio.
El acusado, Javier Ledo, estuvo presente durante la breve visita celebrada a puerta cerrada esta mañana en la Sección Octava de la Audiencia Provincial. A lo largo del día volverá a ser trasladado a prisión en lo que el tribunal resuelve sobre la prórroga de prisión.
Javier Ledo se enfrenta a 25 años de cárcel que solicitan las dos acusaciones particulares -una por parte de los hijos de Paz Fernández y la otra por su madre y hermanas- que le atribuyen un delito de asesinato. En cambio, Ministerio Fiscal y Abogacía del Estado piden quince años de cárcel porque califican los hechos como un delito de homicidio. Ministerio Fiscal y Abogacía del Estado piden quince años de cárcel porque califican los hechos como un delito de homicidioLa defensa sostiene que la muerte de la gijonesa, que tenía 43 años, fue accidental y solicitará su libre absolución. Será un jurado popular quien tenga la última palabra.
