Un gijonés de 46 años detenido a principios de este año después de que su madre le denunciase por agresión y robarle la pensión ha quedado ahora libre de todo cargo después de que el Juzgado archivase la causa contra él. Este individuo, que ha estado defendido por la abogada Leduina Blanco, se encontraba trabajando en una sidrería de la ciudad en el momento en el que su madre situó los hechos.

El incidente, ocurrido el 20 de enero en una vivienda de la calle Ezcurdia, se originó supuestamente un domingo por la tarde. La denunciante aseguró entonces que había sido agredida con violencia por su hijo y que este le había robado la pensión. Es por ello que en su momento se dictó una orden de alejamiento de 50 metros en contra del gijonés que estuvo cumpliendo hasta que el Juzgado ha sobreseído el procedimiento. Los motivos para esa decisión están en la falta de pruebas e incongruencias en el relato de la progenitora, además del asunto laboral que alegó la defensa.