La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La escuelina Eusebio Miranda abrirá a mediados de 2022 con seis grupos de niños

La reforma del antiguo colegio Cabrales, con un nuevo pabellón y cubierta ajardinada, comienza tras siete años de polémica sobre sus usos

El edificio del antiguo colegio Cabrales.

Tras siete años de dimes y diretes sobre sus usos, el antiguo colegio Las obras, tal y como adelantó LA NUEVA ESPAÑA, comenzaron esta semana y se prolongarán durante 20 meses. El futuro centro, que llevará el nombre de Eusebio Miranda, contará con amplias zonas ajardinadas y con dos volúmenes conectados: el bloque actual rehabilitado y un nuevo pabellón, con un total de 1.622 metros cuadrados. Los trabajos, que costarán casi tres millones de euros y que serán ejecutados por la UTE integrada por Arposa 60 S.L. y Geoxa General de Construcciones S.L., rehabilitarán el inmueble protegido y generarán la ampliación necesaria en el patio existente.

La actuación sobre la edificación de 1910 y el patio servirá para crear una escuela infantil de seis unidades, para niños y niñas de hasta tres años, según está previsto en el plan de actuación de la Fundación Institución Miranda. Con la superficie de la edificación existente, es imposible cubrir las necesidades del programa, por lo que se levantará un nuevo volumen construido en el patio y apoyado contra las medianeras existentes. Con esta solución "se plantea separarse de la edificación actual con el fin de respetarla, liberar el máximo espacio posible en el patio y disminuir el impacto visual de las medianeras existentes", describe el proyecto, de manera que la intervención consta de dos actuaciones: la rehabilitación sobre el edificio existente y una segunda de ampliación en el patio.

El acceso al conjunto se hará a través del patio existente, desde la calle Cabrales, en el encuentro entre los dos volúmenes edificados. Esto permitirá generar una zona de llegada y espera, con más amplitud que la acera existente. El cierre actual se eliminará y se creará un almacén para los carritos de los niños, un patio cubierto para uso de la escuela y una zona de juego interior en la parte de ampliación. En la planta sótano, limitada a la superficie existente actualmente, se colocarán todas las máquinas necesarias para el correcto funcionamiento del edificio. La planta baja acogerá el vestíbulo de acceso, el aula de uno y dos años junto con un aseo propio que se encuentra integrado en el interior. También se construirá la cocina y una zona de comedor.

En el volumen de ampliación se generará una zona de juego interior y el acceso al patio exterior cubierto, y en la planta primera del edificio histórico se abrirá otra unidad de 1-2 años, junto con su baño y su zona de descanso para los niños. Esta planta también acoge otras dos aulas de 0 a 1 años, con sus zonas de descanso independientes y un baño compartido situado entre ellas que permite el control visual por medio de ventanales. En este espacio se acondicionarán las dos aulas de dos a tres años con sus zonas de descanso para los niños y un baño compartido situado en el encuentro de las dos aulas, mientras que en la planta bajo cubierta se situará la zona administrativa de la escuela, despacho de dirección, y sala de reuniones, la zona de vestuarios de los educadores y la zona de almacén y lavandería.

Desde esta planta se puede acceder a la cubierta de la zona ampliada, que se pretende se pueda utilizar como patio de la escuela, con unas zonas ajardinadas a modo de huerto. El cierre será acristalado en su mayor parte y con listones de madera, que servirán de guía para el crecimiento de plantas. La cubierta de la ampliación será plana y ajardinada, y en una parte transitable, manteniendo la configuración de un único plano verde horizontal.

Compartir el artículo

stats