La gijonesa Irene Rosales Fernández, madre del popular hostelero Floro Gordillo, falleció ayer a los 85 años, apenas un mes después que su hijo, cuya muerte causó una profunda tristeza entre sus amigos y compañeros de trabajo. Está previsto que el tanatorio de Gijón-Cabueñes acoja hoy domingo, a las 13.00 horas, la celebración de la palabra, de cuerpo presente, por Irene Rosales.