Dos arquitectos –Celestino García Braña y Diego Cabezudo– y dos ingenieros –Ramón Galán y Fernando González Landa–incorporaron ayer nuevos elementos para la reflexión en el debate abierto sobre el futuro del Muro. Y lo hicieron en el marco de un encuentro telemático organizado por la Comisión del Muro para hacer un recorrido histórico por el paseo y desde la autoridad que les confiere que su firma avale las remodelaciones de la fachada marítima ejecutadas en 1992 y 2004.

El verbo soterrar se repitió en varias ocasiones. De hecho para Cabezudo y García Braña el soterramiento del tráfico para liberar el espacio en superficie es la opción más ambiciosa pero la más efectiva. Una idea que lleva sobrevolando desde 1990 y que ambos presentaron en sus diseños. Sería básica para diferenciar espacios y dinamizar la vida tanto ciudadana como económica del Muro.

Ese mirar hacia el subsuelo incluye la opción de un aparcamiento subterráneo, que se incorpora ahora al debate como pieza con una doble función: dar un servicio a vecinos y visitantes y generar una vía de ingresos económicos. “En urbanismo hay que pensar a lo grande y a largo plazo”, sentenció Diego Cabezudo tras concretar que “el espacio es el que hay; la solución es desdoblarlo en dos plantas”, indicó el arquitecto gijonés en un planteamiento similar al de García Braña, asturiano afincado en Galicia y autor del plan especial de 2004. Su apuesta por la ambición le llevó a recuperar la idea de acometer en este contexto esa “envolvente” sobre las viviendas que les daba más metros y creaba una piel nueva y uniforme en la fachada residencial. Una idea que planteó y nunca se ejecutó.

Más pragmático Galán, jefe de la Demarcación de Costas durante años, se limitó a reivindicar que se pueda mantener la circulación rodada en ambos sentidos para evitar congestionar el tráfico en otras vías adyacentes. Una reivindicación a la que unió dos consejos. Uno “que se consiga un consenso de ciudad porque sin consenso no será una obra querida” y dos, que “tengamos claro que no se trata de aumentar la zona peatonal, es aumentar el paseo del Muro”.

A su experiencia al frente de la oficina municipal de Tráfico echó mano Fernando González Landa para castigar con dureza los cambios impulsados por el actual gobierno (PSOE e IU) porque “Gijón siempre ha sido un modelo en materia de tráfico. No hay que buscar problemas donde no los hay, ni soluciones a problemas inexistentes”. Denunció Landa, fundador de Foro, que las medidas tomadas sobre el Muro eran “innecesarias, injustificadas y perturbadoras”.