Este domingo 4 de abril, Domingo de Resurrección de 2021, a partir de las 19 horas se entregan en el ovetense teatro Campoamor los premios AMAS en su XVI edición. Estos premios del Anuario de la Música de Asturias tienen un prestigio incuestionable. Sin duda tiene mucho mérito, en estos tiempos de gel hidroalcohólico, de mascarillas y de espacios culturales semivacíos, la buena salud de la música asturiana.
Además de galardones a los mejores músicos asturianos en 22 categorías por sus grabaciones durante el año pasado, se entregan dos premios AMAS honoríficos “por sus largas y ejemplares trayectorias”. En esta edición se trata del grupo “Felpeyu” y del músico, locutor y promotor musical gijonés Miguel Escalada.
Resulta fácil escribir sobre lo merecido del AMAS Honorífico a Miguel Escalada, porque lleva siendo una figura muy popular desde hace más de medio siglo. Parte del paisaje urbano gijonés que, por coleccionar (además de discos y fotografías musicales) colecciona amigos.
Tiene Miguel Escalada una carrera musical seguramente sin parangón en la ciudad; muy larga su trayectoria para poder resumirla en esta página. Antes de cumplir los veinte años arrasaba en los escenarios gijoneses liderando a “Los Sonys” y ahora mismo, al inicio de esta tercera década del siglo XXI, sigue embarcado en varios proyectos musicales que muy pronto verán la luz.
Incansable Miguel Muñiz Escalada (Gijón, 1946), Miguel Escalada para todos, con la música siempre en la cabeza aunque ya desde fuera de los escenarios. Tomó como apellido “artístico” el su madre, Cándida Escalada, que se jubiló como trabajadora de talleres y reparto en LA NUEVA ESPAÑA tras haberse ganado la vida anteriormente en el diario “Voluntad”.
Con “Los Sonys” comenzó Miguel en el año 1964, y en Gijón “Los Sonys” fueron “Los Rolling Stones” locales, lo mismo que “Los Bríos” eran “Los Beatles” gijoneses. “Los Sonys” originales fueron Miguel Escalada como cantante, acompañado por otros míticos del pop playu como Emilio Acebal, Bernardo Poli, Martín Cristóbal y Diego Inchausti. Varios cambios hubo en “Los Sonys”, y luego nuestro Miguel lideró grupos como “Los Chalecos”, “Los Troncos”, “Los Gritos” y “Salitre”, en este último junto con José Luis Bottamino, Felipe del Campo, Rafa Laviada o Pedro Bastarrica.
“Los Sonys”, con ese nombre, volvieron a actuar el 29 de junio de 1999 tras más de treinta años sin tocar. Ese día compartieron el escenario del gijonés teatro Jovellanos con “Los Bríos”, “The Goggles” y con el conjunto ovetense “Los Junior’s”. A partir de ahí varias actuaciones de “Los Sonys”, junto al amigo Micky Carreño por ejemplo, o en El Parque del Piles el 28 de julio de 2001 junto con Mike Kennedy.
La sala El Jardín, en Somió, tuvo durante unos años un gerente muy especial, y ese fue Miguel Escalada, mano derecha de los propietarios los hermanos Corsino y Fernando García-Rendueles. Hablamos de cientos de actuaciones de artistas nacionales e internacionales que convirtieron a El Jardín en lo que fue durante muchos años: una sala emblemática del ocio en Gijón. Responsable fue también de salas gijonesas como D’Angelo Parque y luego copropietario, junto a Diego Inchausti, de esa misma sala con el nombre de Salitre. Por Salitre pasaron prácticamente todos los cantantes asturianos.
Nuestro protagonista hizo también historia en la radio gijonesa. Primero, en Radio Gijón con un programa de nombre “La casa del sol naciente”, y luego en la exitosa Radio Minuto. Radio Minuto funcionó desde 1983 hasta comienzos de la década de 1990 cuando de Radio Minuto pasó a convertirse en SER Gijón; Javier Asenjo fue el director saliente de Radio Minuto y el entrante de SER Gijón. Un locutor musical con muchos fans era Miguel Escalada. Con el tiempo otras radios contaron con Escalada, como la Cadena Asturiana u Onda Gijón, y televisiones como Popular Televisión.
El premio AMAS Honorífico tiene una impresionante colección discográfica sobre el pop nacional, y desde luego no dejen de consultar el “Blog de Miguel Escalada”. En la TPA sigue en la actualidad haciendo memoria de la música asturiana, y en LA NUEVA ESPAÑA dejó muestras de su saber con numerosos artículos, porque una enciclopedia andante del pop nacional es Miguel Escalada.
Tiempos raros estos que nos tocó vivir, donde vemos a Miguel Escalada con la boca tapada. En realidad nadie pudo (ni podrá nunca) domesticar el desparpajo y la lengua suelta de este “chaval” nacido en la calle de Ezcurdia en el barrio de La Arena. Siempre arenero, siempre “culo moyáu”, siempre heterodoxo, siempre culo de mal asiento.
