El conflicto por el cambio de la jornada laboral en la terminal de minerales de El Musel, Ebhisa, está provocando demoras en la descarga de los barcos, obligando a desviar al Muelle Norte de la ampliación cargamentos de mineral de hierro para ArcelorMittal. La situación se va a agravar previsiblemente esta semana si se mantiene alguna de las dos convocatorias de huelga, una indefinida planteada por el comité de empresa a partir de mañana miércoles y otra de tres días anunciada por CSI –en previsión de que se desconvoque la primera– que comenzaría el lunes de la próxima semana.
El conflicto está afectando no sólo a Arcelor, sino también a operadores de carbones que utilizan la terminal para descargar sus mercancías. Es el caso del barco de 50.000 toneladas para TyC La Mata que atracó en la terminal el pasado jueves y tardó cuatro días en despacharse, cuando en condiciones normales se habría descargado en dos. Según coinciden diversas fuentes consultadas, fue precisamente a partir del jueves de la semana pasada cuando el ritmo de las descargas se vio especialmente afectado, si bien algunos de los consultados apuntan a que ya se venía notando aunque en una medida muy menor, desde hace varias semanas.
Desde el jueves de la semana pasada, se han venido sucediendo en la terminal paradas poco frecuentes de las cintas que transportan el mineral a la siderúrgica. Estas cintas tienen un doble sistema para asegurar que no se ponen en marcha cuando tiene que haber una reparación, por un lado cortando la corriente eléctrica bajando los plomos y por otro mediante un mecanismo que se acciona en el propio lugar de la reparación. Esto último es lo que se ha estado activando en varias ocasiones sin aparente justificación ni identificación del operario que lo efectuó, obligando a paralizar las descargas en el muelle. La plantilla está dividida ante el actual conflicto.
El primer barco que se ha tenido que desviar a la ampliación es el “Federal Rideau”, que entre el domingo y ayer lunes descargó 34.032 toneladas de mineral de hierro en el Muelle Norte. No será el único y al menos uno de los tres barcos que ayer permanecían fondeados frente a El Musel en principio para descargar en Ebhisa, acabará siguiendo los mismos pasos, atracando en el Muelle Norte con más de 70.000 toneladas de mineral de hierro.
Desde el comité de empresa se sostiene que el desvío de barcos al Muelle Norte obedece a la ineficiencia de la nueva jornada laboral, tras la eliminación del tercer turno de trabajo desde el pasado 25 de marzo. Desde entonces Ebhisa ha pasado a trabajar regularmente en jornada de mañana y tarde, con un retén disponible para las noches, en el caso de que sea preciso. Antes estaba operativa las 24 horas del día. Desde el comité se insiste en que los barcos “tienen que marchar porque no podemos atenderlos”, con la organización actual del trabajo.
Además de los dos barcos que hay actualmente en Ebhisa y los tres fondeados en espera, la mayoría con mineral de hierro, entre el jueves que viene y el martes de la próxima semana está prevista la llegada a Ebhisa de otros cuatro barcos con mineral de hierro y carbón. Todos ellos con unas dimensiones y tonelajes que permiten también descargarlos en el Muelle Norte, llegado el caso.
Arcelor y EdP tienen contratos a largo plazo con Ebhisa que contemplan el desvío de barcos a la ampliación en el caso de que no pueda atenderlos la terminal. El incremento de costes asociados –fundamentalmente al tener que transportar los minerales hasta las empresas en camión en lugar de por cinta o por tren– los acaba teniendo que asumir la terminal de minerales.
