No solo de la escasa suma de inversiones para Gijón se nutre la crítica del Partido Popular a la incidencia en la ciudad de los presupuestos generales del Estado. Pablo González, presidente del PP en Gijón, calificaba ayer el escenario de “expolio que da la puntilla a Gijón y nos hunde en la miseria” y lo hacía en una comparecencia conjunta con la portavoz municipal, Ángela Pumariega, y poniendo en relación “los 18,5 millones de inversión para Gijón con los 115,5 millones más que pagaremos los gijoneses en impuestos: 420 euros por gijonés”.

González llega a esa cifra incorporando a las subidas anunciadas en impuestos cedidos al Principado y el pago de los autónomos con los incrementos en IRPF, IVA, sociedades e impuestos especiales. “Son números que espantan a cualquier persona con sentido común”, indicó el diputado regional para quien, además, “estos presupuestos abandonan los grandes proyectos. Y sin ellos no se puede pensar en el futuro de los sectores productivos”.

González y Pumariega evidenciaron la decepción del PP con las “cantidades ridículas” asignadas a Gijón y más en concreto con los 39.000 euros que le tocan al plan de vías cuando, explicó Pumariega, “se necesitan más de 600 millones para la estación y hay 314 pendientes para el metrotrén. La paralización de Gijón va para largo”.

Ambos dirigentes populares cargaron contra la alcaldesa, Ana González, por no liderar la reivindicación de Gijón ante el gobierno de Pedro Sánchez. “El papelón que le toca es insoportable; casi debería darnos lástima porque no se puede ser más metepatas y más gafe”, concretó González.

El presidente del PP volvió a hacer un llamamiento a la oposición, que extendió al gobierno, para volver a un consenso que dinamice Gijón. Su ejemplo fue el plan de vías. El PP sigue trabajando en recuperar su puesto en el consejo de Gijón al Norte y negociar un convenio. “Que satisfaga a Gijón. Dijimos que 751 millones en mejor que nada pero, ahora bien, no nos vale cualquier convenio, cualquier obra o cualquier proyecto”, remató González.