Muchos de los niños que recorrieron ayer el centro en el desfile infantil del Antroxu no recordaban ya que su ciudad pudiese acoger a tanta gente. Para los más pequeños, la de ayer fue la primera jornada multitudinaria de su vida, tras dos años de pandemia acostumbrados a los aforos reducidos, y más de uno acabó agobiado pidiendo cuello a sus padres. “Tenían muchas ganas de salir a la calle, pero en su cabeza ya no tenían el recuerdo de lo que es una multitud”, reconocían ayer varios padres tras el recorrido, que fue desde El Parchís y hasta Begoña atravesando la plazuela de San Miguel.
En el desfile participaron siete grupos. Lideraba n la comitiva las familias del Gloria Fuertes, disfrazados de superhéroes, con mayoría de “supermanes” y “spidermans”, y escoltadas por la Sardina y su amiga Conchi Paredes, que se dedicó a echarle la bronca a cualquier asistente de público que veía sin disfrazar: “¿Qué hacéis trajeaos de domingo? ¡Que ye Antroxu?”. Tras el Gloria Fuertes iban los pequeños del colegio de Tremañes, todos vestidos de piratas. ¿El motivo? Un homenaje a Mariano Tremañes, uno de los profesores, que siempre se encargaba de la clase llamada “Los piratas”. “Es su último año, se jubila, y todos acordamos rendirle homenaje por su trayectoria, es muy querido”, contó Raquel Buelga, madre de las pequeñas Emma y Nadia Buelga y esposa de Víctor Castelao, que ayer llevaba a cuestas a las dos bucaneras. “Están un poco confundidas por ver a tanta gente. Son muy pequeñas y ya casi no recordaban ver este jaleo. Tenían muchas ganas de disfrazarse, pero para ellas está siendo raro”, explicó.
El colegio Noega rindió también un tributo, en su caso, al cine. Los disfrazados de cintas de filme –cada uno homenajeaba una película distinta, todas relacionadas con el público familiar, como “Toy Story” y “Los cazafantasmas”– llevaban a la cola un carrito con los “créditos” de la comitiva, nombrando a los participantes, y un cubo de palomitas.
El grupo más numeroso era el del Codema, disfrazados de rockeros. Poca broma. Chalecos, pelucas, maquillaje de ojos, bandanas, mala leche y un mimado repertorio musical. Tras ellos, iban “Los guajes antroxeros”, con un impecable disfraz de “Los cazafantasmas”, seguidos por las familias del Colegio Montedeva, con trajes también muy cuidados y muy lucidos que imitaban el vestido de “Mary Poppins”. La coreografía la marcaban al ritmo de sus paraguas transparentes. La comitiva la cerraba la asociación cultural “Happy Family”, que lucía aplaudidos atuendos de la temática de “Frozen”.
La única pega de la jornada de ayer fue que todos se habían preparado disfraces de acuerdo a la época del año, con trajes en general bastante abrigados, y los participantes se vieron sorprendidos por un sol acuciante que les deslumbraba mientras hacían todo el recorrido con apenas descanso ente las coreografías. Por eso la llegada al Jovellanos fue como el final de una maratón, con los participantes sentados por el suelo y pegados a su botella de agua. Pero felices.
