Los apartamentos turísticos, que están en auge como opción vacacional a raíz de la pandemia del coronavirus, volverán a estar pletóricos de visitantes este verano, según coinciden en el sector, que el año pasado logró por primera vez alcanzar el lleno también en el mes de julio, cuando lo habitual venía siendo que esa circunstancia se diera sólo en agosto.
Manuel Herminio García Álvarez, presidente de la Asociación Asturiana de Titulares de Viviendas Turísticas señala que “todo va viento en popa”. “La vivienda turística está en auge tras la pandemia, porque es una forma de alojamiento en la que a diferencia de un hotel no tienes contacto con personas distintas de tu círculo habitual. Quien habitualmente usa las viviendas turísticas son las familias, y más en Gijón”, afirma.
García explica que en Gijón hay alrededor de 1.050 viviendas registradas para uso turístico, si bien matiza que “no es que todas se dediquen normalmente al alquiler turístico, sino que hay propietarios que tienen la licencia para evitar una sanción del Principado si, por cualquier circunstancia, como la redacción de un anuncio para su alquiler por una temporada, el Principado entiende que es uso turístico”. Y no sólo el Principado. El Ayuntamiento de Gijón, como desveló LA NUEVA ESPAÑA, va a estrenar en próximas fechas una herramienta tecnológica para rastrear en todas las ofertas de alojamiento de Internet pisos turísticos ilegales.
El precio medio en un apartamento para cuatro personas en Gijón ronda los 120 euros por noche en julio y los 150 en agosto, aunque hay variedad en los precios, también en función de las zonas.
Ariadna Martínez, responsable de trece apartamentos turísticos en la calle Cean Bermúdez, explica que para julio ya tienen comprometidos el 42% y para agosto el 36% de ocupación, señalando que las demás reservas llegarán más adelante, ya que “la mayoría de los clientes no reservan hasta 15 días antes o a lo sumo un mes”.
Paula Fernández, propietaria de Apartamentos Urbanos Moros señala que “la previsión es muy buena” para este verano y agrega que las buenas cifras no sólo se darán en época estival. “Desde principios de año nos empezaron a llegar reservas para todos los meses del año; en la primera semana de enero ya teníamos cerrada la Semana Santa”. En su caso, el ritmo de reservas está siendo “más rápido que en años anteriores” teniendo reservado para julio y agosto “ya el 70% de la ocupación”, además, con un aumento del periodo medio de estancia que ha pasado de ser cinco días el verano pasado a siete para este.
Pilar Noriega, gerente de R2R, que gestiona 44 pisos turísticos en distintos emplazamientos de Gijón, explica que “el verano tiene muy buena pinta, porque nos están entrando ya bastantes reservas; estamos casi al 70% y con previsión de llegar a una ocupación total o como poco del 95%”, Noriega explica que tras la “afluencia máxima” que tuvieron en Semana Santa y el puente del primero de mayo, “hubo un parón” el resto de este mes, pero que desde hace semana y media todos los días les entran numerosas reservas, para estancias medias de seis días.
Alejandro Mortera, anfitrión de tres viviendas turísticas junto a la playa de San Lorenzo y El Bibio, recuerda que el verano pasado estuvieron completas todo el verano y que este va camino de ello, con todas las fechas reservadas salvo los últimos días de agosto, porque la plataforma de reservas a través de la que opera, abre el calendario con tres meses de antelación. Mortera explica que el auge tras la pandemia de los pisos turísticos en Gijón no sólo se está dando en época estival: “En temporada baja tuvimos mucha gente que volvió a Gijón este año, después de haber conocido la ciudad en verano”, con precios en temporada baja a menos de la mitad que en verano, apunta.
Parte de los propietarios de viviendas turísticas que encargan su gestión a profesionales, residen fuera de España. César Nozal, de la Agencia La Playa, que es una de la que ofrece esos servicios para inversores en viviendas, señala que para los propietarios que residen en España es más interesante, por motivos fiscales, el alquiler a largo plazo, pero para los que residen fuera lo es el alquiler vacacional.
