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El tráfico de mercancías en El Musel crece un 13,7% gracias al carbón

Las descargas de mineral térmico se duplican en Ebhisa y el trasiego por otros muelles crece más del 82% entre enero y octubre

Al fondo, parvas de carbón acopiadas en el Muelle Norte de la ampliación de El Musel el mes pasado. | Juan Plaza

El puerto de El Musel ha cerrado los diez primeros meses del año con un tráfico de 15.975.889 toneladas, lo que supone un incremento del 13,7 por ciento respecto a las mercancías que pasaron por sus muelles en el mismo periodo de 2021. El incremento en el trasiego de carbones, en especial el destinado a las centrales térmicas asturianas o de otros países, es lo que explica el crecimiento en la actividad portuaria entre enero y octubre. Los 6,58 millones de toneladas de carbones térmicos y siderúrgicos movidos por El Musel en los diez primeros meses de 2022 ya supera, además 5,1 millones de toneladas que se descargaron o cargaron en el puerto gijonés durante todo el año pasado.

En especial, destaca la recuperación de tráficos de carbón destinado a la generación eléctrica. Las sanciones de la UE al carbón ruso, el colapso de los principales puertos de acopio europeos como el de Rotterdam, el alza de los precios del gas y la sequía son algunos de los factores que están influyendo en el mayor movimiento de este tipo de mineral, tanto para alimentar a las centrales térmicas de EdP en Aboño y Soto de Ribera, como para suministrar desde El Musel a otros países del norte de Europa.

El carbón que se movió por los muelles comerciales (los que no tienen terminales especiales) en los diez primeros meses del año alcanzó las 2.362.380 toneladas, frente a las 1.290.314 del mismo periodo de 2021, lo que representa un incremento del 82,95 por ciento. En cuanto al carbón que se descargó por la terminal de minerales de El Musel, Ebhisa, fue de 4,22 millones de toneladas frente a los 2,88 millones de toneladas de los diez primeros meses del año pasado. Desglosado por tipos de carbón, en Ebhisa se pasó de 1,26 millones de toneladas de carbón térmico a 2,52 millones en los diez primeros meses de este año; mientras que en carbón siderúrgico se pasó de 1,62 a 1,7 millones de toneladas. Esto es, el carbón térmico prácticamente se duplicó en Ebhisa, mientras que el siderúrgico creció en un 6,5 por ciento. Mientras el tráfico de carbón aumentó en Ebhisa, descendió el de mineral de hierro, pasando de 4,93 a 4,67 millones de toneladas descargadas, esto es, un 5,27 por ciento menos. En conjunto, en Ebhisa se descargaron 8,92 millones de toneladas entre enero y octubre.

En términos generales, la actividad del Puerto gijonés en lo que va de año creció en lo que respecta a los graneles y cayó en lo relativo a las mercancías generales. Así, el total de graneles sólidos movidos por El Musel entre enero y octubre asciende a 14,19 millones de toneladas incluyendo las 8,92 de carbón y hierro descargadas por Ebhisa y los 5,27 millones de toneladas (incluyendo los carbones) movidas por los muelles comerciales, representando esto último un aumento del 28,3 por ciento.

Otros aumentos en los graneles sólidos se produjeron en las descargas de cereales, que crecieron en un 70 por ciento hasta alcanzar las 305.127 toneladas y también en el inicio de un nuevo tráfico con Brasil a donde se exportaron hasta la fecha 267.231 toneladas de piedra.

Los graneles líquidos también aumentaron en un 15,3 por ciento hasta totalizar las 766.374 toneladas. Destaca, en términos porcentuales, el incremento del 222% de las descargas de butano, que pasaron de 56.713 a 183.095 toneladas.

En cuanto a la mercancía general, retrocedió tanto la transportada directamente en bodega de barcos como la contenerizada. Así, respecto a la primera se produjo un descenso del 30,5% en los diez primeros meses del año, retroceso que obedece fundamentalmente a un menor tráfico de productos siderúrgicos. En cuanto al movimiento de contenedores, el retroceso fue algo inferior, con un 21% menos de TEU (contenedores de seis metros o su equivalente).

La mayor actividad carbonera en El Musel está relacionada en buena medida con el desembarco en el puerto gijonés de dos de los principales operadores internacionales de materias primas energéticas, Glencore y Vitol Group, que están utilizando El Musel para acopiar carbones de Sudáfrica en el primer caso y de Australia y el continente americano en el segundo. El objetivo es reexportar el mineral hacia países del norte de Europa –con algún cargamento también enviado a Marruecos– a lo que se suma que una de estas compañías también está suministrando carbón a las centrales térmicas de EdP. Los tres grupos térmicos que la compañía eléctrica tiene en Asturias han estado funcionando en estos meses, con asiduidad el grupo II de la térmica de Aboño, mientras que el grupo I casi ha agotado ya el cupo anual de 500 horas que tiene y el grupo III de Soto de Ribera se ha reactivado.

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