El Supremo rechaza el recurso municipal por la finca de Xicu Piñera

La viabilidad de que Gijón cobre 9,66 millones se reduce en el concurso de Aguas de Panticosa

M. C.

Quince años después de que un Juzgado de primera instancia de Gijón hubiera condenado a Aguas de Panticosa y a un particular a indemnizar al Ayuntamiento de Gijón con 9,66 millones de euros por la venta irregular de la finca de Xicu Piñera en 2007, cuando formaba parte del Plan de Cabueñes, las posibilidades de que el Ayuntamiento de Gijón acabe ingresando esa cantidad se han visto mermadas después de que el Tribunal Supremo haya rechazado el recurso que interpuso el Consistorio para que esa deuda no se califique en el concurso de acreedores de Aguas de Panticosa como subordinada. En un concurso, este tipo de deudas son las últimas con derecho a cobro y comúnmente no suelen llegar a cobrarse.

En su día, el Ayuntamiento había querido adquirir la finca denominada de Xicu Piñera, pero los llevadores de la misma ejercieron el derecho de tanteo y se quedaron con ella. Sin embargo, los llevadores incumplieron los plazos legales que les impedían volver a venderla a un tercero, en este caso a Aguas de Panticosa. Cuando el Ayuntamiento quiso recuperar la finca no pudo, ya que esa sociedad la vendió a Nozar y luego pasó a manos de la promotora Beyos y Ponga.

En enero de 2010 el Juzgado de primera instancia número 3 de Gijón sí reconoció al Ayuntamiento el derecho a ser indemnizado en los 9,66 millones citados por la venta irregular de la finca, una sentencia que se recurrió. Y entre medias, en diciembre de ese año, Aguas de Panticosa entró en concurso de acreedores.

¿Por qué la deuda acabó como subordinada en vez de ordinaria, que sí tiene posibilidades de cobro en un concurso? El Ayuntamiento no solicitó a tiempo que se incluyera su deuda en el concurso de acreedores y no recurrió la calificación de la misma en primera instancia –cuando debía–, sino en un recurso ante la Audiencia Provincial.