La Escalerona encara una revisión para determinar si existen daños en la estructura

El estudio encargado por el Ayuntamiento, que comenzará "en breve", revelará si se precisa una rehabilitación o un plan de mantenimiento

Vista de la Escalerona.

Vista de la Escalerona. / Pablo Solares

La Escalerona será sometida a una exhaustiva revisión. Ante los visibles síntomas de deterioro, el Ayuntamiento ha decidido encargar un informe para valorar si la Escalera Monumental de San Lorenzo precisa una rehabilitación a fondo o un plan de mantenimiento. Las labores se iniciarán "en breve", según las fuentes municipales consultadas.

Los signos de desgaste de la Escalerona, que cumplió 90 años el pasado 15 de julio, son evidentes en varios puntos de su estructura. Los más visibles se encuentran en los peldaños, sobre todo los que se encuentran más cerca de la arena, que presentan grietas de varios centímetros de anchura y profundidad. Además, también hay varios cristales del monolito fracturados, desconchones de pintura y signos de óxido en las barandillas y otros elementos metálicos de esta estructura tan expuesta a las condiciones meteorológicas y al mar.

La Escalerona encara una revisión para determinar  si existen daños  en la estructura

Desperfectos en los cristales rotos en la columna del reloj del monumento y desconchones en la estructura. / Pablo Solares

Ahora, la prioridad para el gobierno local es determinar si los daños que padece la obra del por entonces arquitecto municipal, José Avelino Díaz y Fernández-Omaña, son estructurales o se trata de desperfectos superficiales. En caso de estar dañado el armazón, será necesario afrontar una rehabilitación de calado. En el caso de ser desperfectos exteriores, se optarán por un plan de mantenimiento que hagan un lavado de cara a la estructura que da acceso a la playa de San Lorenzo. Los exámenes para realizar esta valoración serán supervisados desde la concejalía de Obras, liderada por el forista Gilberto Villoria.

Las deficiencias en el que es, sin lugar a dudas, uno de los grandes iconos de la ciudad, vienen siendo denunciadas por los vecinos en numerosas ocasiones. Aunque el Ayuntamiento realiza labores de mantenimiento en la zona todos los años (y en el paseo de San Lorenzo en general), la continua exposición a la humedad y los fenómenos meteorológicos, causan desperfectos cada invierno.

La obra de Fernández-Omaña no experimenta una restauración de calado desde el año 2000. Aquella fue ejecutada por el arquitecto Miguel Díaz Negrete, hijo de Fernández-Omaña. Para efectuar aquel trabajo, que se prolongó hasta 2002, el arquitecto trató de respetar al máximo la obra de su padre, buscando materiales lo más parecidos posibles –o incluso idénticos– para realizar la reforma.

Por la izquierda, grietas  en los peldaños de la Escalerona, desperfectos en los cristales rotos en la columna del reloj del monumento y desconchones en la estructura. Debajo, una vista de la Escalerona. | Pablo Solares

Grietas en los peldaños de la Escalerona / Pablo Solares

Hace algo más de diez años, en 2013, la Escalerona también fue sometida a un estudio similar al que ahora planea el Ayuntamiento y una posterior reforma. Costó 25.000 euros y generó ciertas controversias a nivel administrativo, ya que en un primer momento el gobierno local consideraba que la reparación era competencia del Ministerio de Medio Ambiente, por su ubicación en territorio de Demarcación de Costas. Finalmente, aquellos trabajos, que estuvieron en todo momento supervisados por personal del servicio municipal de Patrimonio, se prolongaron durante varios meses.

El proyecto de la Escalerona fue ideado en la década de los 30 del siglo pasado. Fue justo después del crac del 29, cuando el entonces alcalde, Gil Fernández Barcia, se le ocurrió poner en marcha un plan de inversiones públicas para reactivar la economía local. Algo así como un "new deal" a la gijonesa. De aquella iniciativa salió la Escalera Monumental de San Lorenzo, que no mucho después comenzó a llamarse la Escalerona, fruto de esa tradición tan gijonesa de utilizar el aumentativo con aquellos iconos de la cultura local.

A finales del año pasado, y para conmemorar el 90.º aniversario del monumento, LA NUEVA ESPAÑA de Gijón organizó la exposición "Guardianes del Tiempo", en la que se hacía un repaso fotográfico a las nueve décadas de historia de la Escalerona de San Lorenzo: desde cómo era San Lorenzo en el primer tercio del siglo XX hasta las complejidades de su construcción pasando por todos los detalles de la rehabilitación de 2002 o su importancia en la cultura popular gijonesa. También para conmemorar la efeméride, este periódico tiene a la venta en su tienda virtual un pin de la Escalerona.

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