El Cairo, Agencias

El número de víctimas mortales en los enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes en varias ciudades egipcias, en particular El Cairo y Suez, ascendía anoche a doce, tras cuatro días de disturbios ininterrumpidos desde la masacre de 74 personas en un campo de fútbol de Port Said el miércoles por la noche. Los heridos son ya más de 2.500.

Fuentes oficiales aseguraron que siete de los muertos fallecieron en los choques registrados en El Cairo, mientras que otros cinco perdieron la vida en enfrentamientos similares en Suez, al este de la capital.

Pese a que cada poco tiempo se pactan treguas entre manifestantes y autoridades, los choques continuaban anoche sin que descendiese su virulencia más que intermitentemente. Los disturbios de anoche se produjeron en los alrededores de la sede del Ministerio del Interior, según informaron los propios medios egipcios.

En esas circunstancias, el consejo civil designado para asesorar al Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas de Egipto afirmó que las candidaturas formales a la Presidencia de Egipto deben ser aceptadas a partir del 23 de febrero, casi dos meses antes de lo previsto. Las autoridades habían anunciado el 15 de abril como fecha de inicio y los comicios estaban previstos para junio.

El Consejo recomienda que se celebren en abril o mayo para poner fin cuanto antes a la explosiva situación que vive el país y evitar que el proceso de transición a la democracia descarrile.

Entre tanto, el senador estadounidense y presidente del subcomité del Senado encargado de la distribución de ayuda internacional, Patrick Leahy, advirtió al régimen militar egipcio de que la ayuda que proporciona EE UU para el restablecimiento del país ya no es «incondicional» y que «los días de los cheques en blanco se han terminado».

A través de un comunicado, Leahy envió un contundente mensaje a la junta militar que gobierna el país tras el derrocamiento del ex presidente Hosni Mubarak en el que insta a las autoridades a preservar la paz y a abstenerse de reprimir violentamente a los manifestantes que exigen la instauración inmediata de un Gobierno democrático.

Estas declaraciones se realizan en un momento en el que una delegación del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas de Egipto visita EE UU para ratificar el acuerdo por el que el Ejército estadounidense se compromete a entregarles 1.300 millones de dólares en concepto de ayuda militar. A la indignación de Leahy se suma la de más de 40 legisladores que el viernes advirtieron a través de varias misivas tanto al Ejército egipcio como al secretario de Defensa de EE UU, Leon Panetta, y a la secretaria de Estado, Hillary Clinton, de que la ayuda corre serio peligro.